lyon. La primera vez que lo subió, a Contador casi se le sale el corazón por la boca. "Fue en la Dauphiné de 2009 y no estaba tan en forma como un mes después en el Tour. Entonces me pareció hasta relativamente sencillo", dibuja el madrileño, que ha perdido todos los combates frontales contra Froome en lo que va de Tour y de temporada, el final en alto de Ax 3 Domaines y la crono de Mont-Saint-Michel son los dos últimos, pero recuperó un minuto el día que el viento zarandeó el Tour. ¿Qué tocará hoy?
"Una interesante batalla", dice Froome, que recuerda que se ha gastado mucha fuerza estos días -a 47 por hora el viernes, el día de los abanicos; a 44 ayer, casi 200 kilómetros bajo el sol, con lo que eso quema-. "En términos ciclistas, ganar en el Ventoux es como cumplir un sueño, por lo que mucha gente luchará por ello", abunda el líder sin dar pistas sobre la manera en la que afrontará la subida mientras su patrón, Dave Brailsford, dice que su chico está en perfectas condiciones y que no ve el momento de que llegue la escalada al Ventoux, como si esperara otra lección del keniano, otro palo a los rivales que zanjara el debate del Tour. Ocurrirá en el Ventoux, donde Gaul le ganó a Bahamontes la cronoescalada del 58, murió Simpson en el 67 y le rindió homenaje Merckx en el 70 con un ataque monstruoso, como todos los suyos, antes de desvanecerse después en el podio. "Es un puerto especial, distinto", reconoce Contador, que lo divide en dos partes. Una de muchísima pendiente y cubierta de vegetación y otra abierta a un desierto de piedras donde reina el viento, "que generalmente pega de frente". "Si tienes un día malo puedes perder muchísimos minutos", abunda el madrileño. O recuperarlos. Es en lo que piensa Quintana, el mejor escalador del Tour. Se lo susurró Bahamontes al oído. El colombiano es el único, al menos, que parece capacitado para poder romper la carrera en la montaña, cuando el asfalto pica, burlar el marcaje de Froome y discutirle la victoria en la última semana de los Alpes donde Valverde, a más de diez minutos ahora en la general pero igual de fuerte que hasta el momento, puede jugar un papel capital. Primero, de todas maneras, el Ventoux, una subida diferente.