vitoria. El corredor Santiago Ramírez, del conjunto Lizarte, se proclamó vencedor la mañana de ayer en la línea de meta de Vitoria en la segunda y última jornada de los Dos Días de Álava. El corredor canario se impuso en la llegada a la capital alavesa después de completar un exigente recorrido de 118 kilómetros por los alrededores de Vitoria y con la dificultad de ascender en tres ocasiones el Puerto de Vitoria. El excelente trabajo de su equipo allanó el camino para el canario, que en todo caso refrendó las buenas sensaciones que venía mostrando y se proclamó justo vencedor tras una etapa muy dura.

Santiago Ramírez coronó el buen trabajo del Lizarte a lo largo de toda la jornada. El combinado vasco siempre tuvo algún representante destacado. En todo momento dispuso de corredores en fuga durante el recorrido para desgastar a los rivales y rematar la buena estrategia diseñada por los hombres de Manolo Azcona.

El canario, en todo caso, tenía la misión de rematar el plan con el triunfo. Ramírez fue el tercer hombre de la estrategia diseñada por el director para llevarse el triunfo y fur precisamente en la ascensión a Zaldiaran cuando logró escapar del trabajo del pelotón y se hizo con una pequeña ventaja que supo defender hasta la llegada.

Un total de 114 corredores afrontaron en la fría matinal del domingo las tres vueltas que debían completar a un circuito con un trazado de 38 kilómetros. Ya desde los compases iniciales quedó muy claro cuál iba a ser el guión. El inicio de la carrera ya permitió percibir las enormes ganas con las que el Lizarte iba a afrontar la carrera con el único objetivo de sumar el triunfo.

Manolo Azcona planteó varias trampas, siempre con corredores implicados en todas las fugas, y al final logró cosechar su premio. En parte, como es lógico, porque todos sus ciclistas tuvieron piernas para ello. Mar Soler fue el primer representante en la escapada del día que llegó a tener minuto y medio y después lo intentó en solitario.

Sucumbió al trabajo del pelotón pero Lizarte lanzó entonces a su segundo aventurero. Jorge Arcas fue el que probó fortuna ya dentro de los diez kilómetros finales, pero no llegó a alcanzar más de veinte segundos de renta.

Santi Ramírez fue el tercero y definitivo. Probó fortuna en las rampas de la subida a Zaldiaran y logró coronar el alto con una mínima renta de cuatro segundos que supo mantener hasta la línea de meta, para certificar con el triunfo la buena estrategia de Lizarte.