con 21 pérdidas de balón es muy difícil que exista equilibrio en el juego. La pérdida de balón no solo elimina la opción de tiro, sino las potenciales segundas opciones. Este apartado viene directamente relacionado con las posesiones. Como decía Casamitjana: las posesiones hay que clasificarlas en dos tipos, las gratuitas y las de pago. Las primeras son aquellas que se consiguen sin ningún costo, es decir, las que se consiguen luchando por balones en el aire que no pertenecen aún a nadie y regalos del contrario. Las de pago son las que conseguimos cuando el contrario nos mete canasta. En el partido contra el Obradoiro el Caja Laboral tuvo muchas posesiones de pago, ya que defensivamente hablando siguió con la misma tónica que contra el Montepaschi Siena. Blandos en defensa, mal en el 1x1, mal en el marcaje a los tiradores y mal en la intensidad. El Obradoiro fue muy poco a la línea de tiros libres en primer lugar porque estuvo muy acertado y en segundo lugar por la permisividad baskonista. Ante la más que probable fatiga psicológica por las últimas derrotas, el equipo tiene que gestionar las posesiones de otra manera para no cometer tantos errores. Es verdad que el Obradoiro llevaba casi 15 días preparando este partido, sin competir desde entonces y eso en según que momentos puede ser beneficioso. No siempre, pero en este caso lo fue. Físicamente fueron superiores. Es un equipo muy trabajador que no da un balón por perdido, y muy motivado por jugar ante un rival de Euroliga. Desde que llegó Tabak al equipo, es el peor momento que está pasando el equipo y ahora habrá que ver cómo gestiona esta mala racha de resultados. Me sorprendió la rueda de prensa de Zan, ya que fue muy contundente en sus afirmaciones. He visto a un Tabak duro, sin excusas, llamando a las cosas por su nombre. Es momento de que gestione una dinámica negativa como primer entrenador. Para finalizar quiero hacer un pequeño apunte sobre hacia dónde va el arbitraje. Y no hablo solo a nivel de la ACB sino de todas las ligas inferiores. Hoy en día ya no se puede hacer un reverso porque te pitan cámino. Los cambios de mano por delante los jugadores ya se lo están pensando más de una vez para que no les piten infracción por cogerla demasiado. Y ya no te cuento si el jugador utiliza un traspiés o un salto ruso. Esta forma de ver el baloncesto está limitando las acciones de los jugadores. Se debería observar al otro lado del charco, a la NBA, para que el espectáculo prevalezca sobre la reglamentación o que el reglamento se amolde al espectáculo y a la diversión.
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