málaga. Carlos Jiménez no abandonará la disciplina del Unicaja, con el que el pasado sábado en Zaragoza disputó su último encuentro como jugador profesional tras 19 temporadas en la máxima categoría del baloncesto español. El legendario alero madrileño, uno de los referentes de la era dorada del baloncesto estatal, va a continuar en el club costasoleño. Como era su intención antes de que la lesión de Sergi Vidal lo volviera a poner en activo, una vez que finalice su relación contractual como jugador pasará a formar parte del cuerpo técnico del croata Jasmin Repesa.

El madrileño, de 36 años y que pasó trece temporadas en el Asefa Estudiantes y seis en el conjunto malagueño para un total de 641 encuentros en la ACB, había puesto fin a su carrera la pasada temporada, pero la inesperada lesión de Vidal le hizo llegar a un acuerdo con el club andaluz para ayudar al equipo en el tiempo que durara esta baja. Su concurso, además, no ha pasado desapercibido.

Ahora, con el alero catalán ya reincorporado con total normalidad a la dinámica del Unicaja, Jiménez, uno de los jugadores más laureados de la selección española con seis medallas, ha abandonado la práctica deportiva de maneras definitiva. Entre sus méritos están los de ser el único jugador de la historia de la ACB que está presente entre los 50 mejores jugadores de la historia en partidos jugados, minutos, puntos, rebotes, asistencias, triples, tapones y recuperaciones. Además, es el segundo máximo reboteador de la historia de la ACB con 3.526 tras el pívot norteamericano Granger Hall, mientras que, a nivel de títulos, sumó una Copa del Rey en 2000 con Estudiantes, equipo con el que fue subcampeón liguero en 2004. Por ello, según anunció la entidad andaluza, el domingo, en los prolegómenos del partido ante el Barcelona, el club malagueño le realizará un pequeño homenaje para que todos los aficionados tengan la oportunidad de rendirle tributo a un jugador histórico y puedan despedirle como merece.