Manacor. Rafa Nadal volvió ayer a los entrenamientos en las pistas, por lo que se mostró "feliz", ya que es un síntoma de que su lesión evoluciona de forma favorable, aunque descartó tener fijada una fecha definitiva para volver a competir. "Vamos despacio, con cautela, día a día, y veremos si mi cuerpo y la rodilla en particular vuelven a aceptar las cargas y puedo estar compitiendo lo antes posible, pero siempre dentro de la paciencia y la seguridad de que las cosas van bien", declaró Nadal tras su primer entrenamiento en una cancha de tenis después de estar alejado de ella varios meses.

El balear confirmó que su lesión en la rodilla izquierda, en la que sufre la enfermedad crónica del síndrome de Hoffa (una inflamación de la zona de tejido graso que se extiende por debajo del tendón rotuliano), está mejorando, por lo que ahora toca otra fase: "Entrenar poco a poco y encontrar el momento adecuado para volver".

El número cuatro del mundo afirmó que no se le ha pasado por la cabeza retirarse a pesar de este largo parón en su carrera, de casi cinco meses, ya que solo tiene 26 años. "Además mi lesión no es para retirar a nadie", apuntó. El siete veces campeón de Roland Garrros lamentó la derrota de España ante la República Checa en la Copa Davis. "Se hizo todo lo que se pudo, el equipo ha dado la cara y los cuatro (jugadores) han estado a un buen nivel", aseguró.