bilbao. Euskaltel-Euskadi, junto al resto de equipos de la élite mundial, está inmerso estos días en una carrera por colocarse en la mejor posición posible de cara a entrar en el World Tour. El próximo día 20 terminará oficialmente la temporada y se cerrará el plazo del que gozan los equipos para cerrar sus plantillas y contabilizar los puntos que acumula su relación de ciclistas. El equipo naranja vive estos días con el estrés de saber que sus puntos no son suficientes para estar entre los quince primeros en la clasificación de equipos. Ese es el número de licencias que la UCI concede automáticamente. Otras tres plazas las concederá en la Comisión de Licencias atendiendo a diferentes criterios. Ahí es donde cinco equipos pugnarán por tres plazas.

Euskaltel-Euskadi esconde sus movimientos en el mercado. Los puntos cosechados por Samuel Sánchez se antojan insuficientes, por lo que los dirigentes del equipo barajan la posibilidad de romper la norma de utilizar solo corredores formados en el entorno. A falta de que Igor González de Galdeano salga a la palestra aclarando cuál será el camino por el que opta Euskaltel-Euskadi, han salido a relucir los nombres de los eslovacos Robert Vrecer y Jure Kocjan, Andre Schulze, Marek Rutkiewicz e incluso el del venezolano José Rujano, quien parece ya descartado porque tan solo aportaría 27 puntos.

El mutismo de Euskaltel-Euskadi está plenamente justificado. Nadie quiere airear sus fichajes para que sus adversarios no sepan cuántos son los puntos que deben mejorar. El sistema impuesto por la UCI convierte el acceso al World Tour en una subasta. Al margen de las incorporaciones, solo queda la posibilidad de sumar puntos en el Tour de Pekín, donde Samuel Sánchez e Igor Antón lo darán todo entre el 9 y el 13 de este mismo mes.

Para Euskaltel-Euskadi se antoja esencial acumular puntos de cualquier manera posible para superar a equipos como Saxo Bank, Argos-Shimano o Europcar. Se da la circunstancia de que el equipo de Galdeano se encuentra con el handicap de que llega a la Comisión de Licencias con la necesidad de pedir dicha licencia y no renovarla, tal y como sucediera el año pasado. Este matiz puede ser definitivo, ya que la UCI tiende a conceder un puesto World Tour a los equipos que tienen licencia concedida para más años. Es lo que ocurre, por ejemplo con FDJ o Lotto-Belisol. Los primeros no se están volviendo locos en el mercado a la búsqueda de puntos, porque saben que tienen ventaja respecto a otros rivales al tener licencia hasta el curso 2014. El Lotto-Belisol, por su parte, solo piensa en estar entre los 20 primeros de esta temporada, ya que goza de licencia para cuatro años más.

fichajes de los rivales Los tres rivales directos de Euskaltel-Euskadi se encuentran en coyunturas bien diferentes, lo que hace este sprint todavía más caótico e impredecible. El Saxo Bank cuenta con una estrella como Alberto Contador, pero en estos momentos se está debatiendo la nulidad de la norma que no permite contabilizar durante dos años los puntos de un corredor que ha estado sancionado por dopaje. Mientras se resuelve, el equipo ha acudido al mercado en busca de ciclistas que le aporten los puntos necesarios, como Roman Kreuziger, Daniele Bennati, Oliver Zaugg, Jay McCarthy o Marko Kump. El Argos-Shimano también ha reaccionado ante la lucha que se presenta y ha acudido al mercado para intentar ganar puntos con hombres como Luka Mezgec, Nikias Arndt, Warren Barguil o Jonas Ahlstrand, cerrando además ayer mismo la incorporación del joven sudafricano Reinardt Janse van Rensburg, uno de los corredores más codiciados del mercado, el cuarto ciclista con más triunfos en el presente curso. Por consiguiente, en las próximas semanas se deben concretar los fichajes de Euskaltel. Eso le podría colocar en una posición más ventajosa.

El próximo día 20 concluye el plazo para cerrar las plantillas y contabilizar los puntos acumulados