Un final de segundo cuarto nefasto y el gran papel del boya montenegrino Boris Zlokovic, autor de cuatro tantos, condenaron a España y le dejaron fuera de la lucha por las medallas. El combinado masculino de waterpolo sigue sin brillar en una cita olímpica desde la plata lograda en los Juegos de 1996 en Atlanta.

España solamente resistió el ritmo de Montenegro en el primer cuarto. Al principio, todo funcionaba para el equipo dirigido por Rafa Aguilar. El combinado estatal lograba encontrar puerta con facilidad y gracias a ello lograron mantener el partido empatado hasta el 5-5, anotado por Vallés.

A partir de ahí, la portería se hizo muy pequeña para los chicos de Aguilar. En total, España estuvo más de ocho minutos si anotar y los montenegrinos no desaprovecharon su oportunidad para marcharse en el marcador. Un parcial de 0-3 liderado por el gran protagonista del partido, Zlokovic, resultó a la postre decisivo.

Mallarach cortó la sequía goleadora pero, a pesar del gran labor del portero de España, Iñaki Aguilar, Draskovic y el siempre presente Zlokovic pusieron el partido muy cuesta arriba para el combinado estatal. Al final del tercer cuarto los montenegrinos lideraban el encuentro por 6-10.

En el último cuarto España empezó a soñar con la remontada y llegó a ponerse a un punto pero, a falta de 1.23, Nikola Janovic sentenció el partido y puso en el marcador el 9-11 definitivo.

España se queda fuera de la lucha por las medallas por terceros juegos consecutivos. Campeón en Barcelona 92, subcampeón en Atlanta 96, perdieron el bronce en Sydney 2000 frente a Rusia y después sextos en Atenas y quintos en Pekín. Al final del partido Rafa Aguilar reconoció la superioridad de Montenegro: "Fuimos al límite, pero Montenegro fue mejor, hay que reconocerlo".