vitoria. Recién aterrizada en Madrid tras disputar dos partidos amistosos contra Croacia, Eli Pinedo (Amurrio, 13-V-1981) se toma un pequeño pero merecido respiro antes de que la selección femenina de balonmano debute el próximo sábado en los Juegos Olímpicos de Londres. Esta será la primera y probablemente última participación olímpica de la jugadora del Bera Bera y, por ello, se resiste a renunciar a las medallas aunque a la selección estatal le haya tocado figurar en el famoso grupo de la muerte.
Cada vez están más cerca sus primeros Juegos, ¿nerviosa?
Nerviosa y un poco con la expectativa de llegar a Londres y ver la Villa Olímpica, porque no te haces a la idea de cómo es hasta que llegas.
Bronce en el Mundial, plata en el pasado Europeo... Se han acostumbrado a las medallas, ¿no lograr una en Londres sería un fracaso?
No, por supuesto que no. Tenemos que ir partido a partido porque queremos llegar lo más lejos posible. Tras el Mundial de Brasil del pasado diciembre, donde logramos el bronce, pensamos en una medalla y en poder subirnos al podio. Hemos tenido la mala suerte de caer en un grupo muy complicado, pero vamos a salir a por todas porque al final tenemos que saber que si jugamos como siempre y peleamos cada balón tenemos muchas opciones.
Están en el bombo con Noruega, Dinamarca, Francia, Corea y Suecia. ¿A qué selección ve por encima del resto?
Noruega es campeona de todo: del Mundo, de Europa, olímpicas... Lo ganan todo, entonces son favoritas para ser las líderes del grupo y para llevarse el oro. La presión la llevan ellas y si podemos ganarlas nosotras mejor que mejor, pero la teoría dice que las noruegas son mejores.
¿Y en la práctica? ¿Cree que es posible ganar a Noruega?
Claro que es posible. Ya empatamos en Macedonia, en el Europeo que logramos la plata, así que... ¿por qué no vamos a poder ganarlas ahora?
¿Y cuáles serían las bazas para vencerlas?
Pues defendiendo muy bien y perdiendo muy pocos balones porque cuando pierdes la posesión contra Noruega, te contraatacan muy rápido y fácil. Eso lo hacen muy bien.
Y al margen de Noruega, ¿cuáles serían las otras selecciones a tener en cuenta?
Francia, por supuesto, que es la actual subcampeona del Mundo, Suecia también es una selección muy fuerte, Dinamarca, Rusia... Vamos, todas las selecciones que nos han tocado en el grupo más Rusia del otro grupo y Montenegro, que son las ocho primeras del mundo en este último Mundial.
Vamos que en estos Juegos han tenido una suerte...
Terrible sí, porque en nuestro grupo estamos las cuatro primeras del último Mundial: Noruega, Francia, Dinamarca y nosotras. Solo pasan cuatro de cada grupo y además es importante en qué posición quedas porque el cruce es en cuartos y si te toca contra el primero del otro grupo que seguramente será Rusia, se prevé un partido muy complicado.
¿Cuáles son las virtudes de esta selección?
Tenemos una defensa muy fuerte y cuando estamos a un buen nivel en defensa tenemos muchas posibilidades de ganar. Pero el verdadero éxito es el grupo, el ambiente y el buen rollo que hay y eso se nota en la pista.
¿Y algo que haya que mejorar para poder optar a medalla?
Las pérdidas de balón cuando jugamos contra selecciones fuertes. Nuestro estilo de juego, muy rápido y arriesgado, hace que nos crucifiquen esas pérdidas de balón. En muchos partidos se nos van en el marcador por ello, pero es nuestro juego, al no tener tías de dos metros que te lanzan de diez metros necesitamos llegar hasta los seis.
¿Ve factible superar la sexta plaza de Atenas 04?
Está complicado pero tampoco nos ponemos límites.
Además, son una selección joven, tienen margen de mejora.
Eso es, hay jugadores muy jóvenes que tienen mucho carácter. Lo que pasa es que algunas ya no viviremos los siguientes Juegos así que vamos a intentar hacerlo lo mejor posible en estos.
¿Cree que va a ser su última cita olímpica?
Tengo 31 años y no creo que llegue a los próximos Juegos. Quiero ser madre y si espero mucho se puede complicar. Nunca se sabe, pero creo que serán los últimos Juegos.