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El joven que amenaza el reinado de Usain Bolt
Vitoria. compatriotas, compañeros de preparación y pupilos del mismo mánager, Glen Mills. Ese es el marco que ha envuelto la relación de Yohan Blake -el aspirante- y Usain Bolt -el actual rey del atletismo- durante los últimos años. Pero cuando los focos alumbran y la competición llama a la puerta no hay amigos que valgan. "Se acabaron los consejos", aseveró el actual recordman mundial, cinco veces campeón del mundo y triple campeón olímpico, tras la exhibición de Blake en la última jornada de la Liga Diamante, celebrada en Bruselas el año pasado.
Allí, con la capital belga como testigo, la mayor amenaza del Relámpago logró dejar atónito al mundo del atletismo tras lograr la segunda mejor marca de la historia en los 200 metros, con un tiempo de 19"26, solo siete centésimas peor que el récord mundial de Bolt. Esa fue la confirmación de que las piernas de Blake van en serio, de que su evolución desde que entrara en escena hace tres años va camino de poner en cuarentena unas marcas que se antojaban un muro para cualquier opositor a derrocarlas. Y es que el aspirante, que en la madrugada del viernes al sábado volvió a sorprender a Bolt en los 100 metros, con un tiempo de 9,75 segundos, -once centésimas más rápido que su maestro Bolt-, ha comido, entrenado y aprendido del campeón. De un Usain Bolt que empieza a ver cómo su reinado amenaza con ser desterrado y destruido por alguien que ha tenido muy cerca. Demasiado quizás.
La final de los 100 metros del pasado Mundial de atletismo disputado en Daegu sirvió para presenciar el primer gran título de Blake, pero la falsa salida de Bolt eclipsó su triunfo. Su victoria pareció perder mérito debido al fallo del Relámpago, aunque hubo quienes quisieron ir más allá para descifrar la posible causa de la errónea salida del actual recordman mundial. Asafa Powell, el precursor del boom jamaicano en el sprint y el gran ausente en el Mundial de Daegu, y Maurice Greene, oro en los 100 metros lisos en los Juegos Olímpicos de Sydney 2000, tiraron de la teoría de que el error de Bolt vino provocado entonces por su miedo a Blake. "Sabía que su margen sobre él se había reducido y que necesitaba una salida rápida. Por eso tomó tanto riesgo", dijo Powell, barruntando ya un posible cambio hegemonía en el Olimpo del atletismo.
Palabras que Blake no quiso llevar más allá y a las que trató de restar importancia al asegurar que "Usain sigue siendo el mejor", aunque el actual campeón mundial en la especialidad de los 100 metros es sabedor de que está ante su gran oportunidad, ante el reto y la posibilidad de hacerse un hueco en la historia del atletismo derrotando a su máximo rival en los Juegos Olímpicos de Londres. Por muy compañero y amigos que sean o fuesen en el pasado.
una sombra entre éxitos Y es que, dicen que lo de ganar se lleva en la sangre. Que uno se hace deportista con el paso de los años y de los duros entrenamientos, pero que la magia no se compra, que el don es algo que no está a la venta se busque donde se busque. Ese parece ser el caso de Blake, quien sin embargo, tuvo que hacer frente en 2009 a una sanción de tres meses tras verse involucrado en un caso de dopaje. La causa fue un estimulante que se le detectó en su cuerpo -Metilxantina-, y que por aquel entonces no estaba en la lista negra de la Asociación Mundial Antidopaje, lo que provocó que la sanción fuese catalogada como leve.
Fue el peor momento en la carrera de Blake, nacido en la Parroquia de Saint James en diciembre de 1989, y acostumbrado desde muy joven a saborear las mieles del éxito. Así, fue en el Campeonato Nacional Juvenil de Jamaica de 2006 donde logró darse a conocer tras ganar sendas medallas de oro en los 100 y 200 metros lisos, una temporada que completó logrando el bronce en el Campeonato Mundial Junior de Atletismo en 100 metros, con un tiempo de 10, 42 segundos. Unas marcas que ya avisaban del potencial del aspirante jamaicano, que ahora, a sus 22 años -por los 25 de Bolt-, parece estar ya en condiciones de luchar por todo en los próximos Juegos de Londres, donde ambos se verán las caras, para tratar de sacar el máximo beneficio posible a sus cualidades. Distintas, pero semejantes a la vez.
Y es que, a pesar de la diferencia física existente entre los dos colosos jamaicanos -unos 15 centímetros más alto Bolt (1,96 metros), pero un cuerpo más compacto el de Blake-, los dos comparten un mismo don: la aceleración final. De este modo, la principal arma con la que Usain Bolt empequeñece a sus rivales hasta hacerles pedazo, y con la que ha logrado deshacerse de rivales como Asafa Powell y Tyson Gay en los últimos años, también forma parte del ADN de Blake. "Tiene una potencia natural enorme y una gran resistencia", señaló sobre él Pierre Carraz, entrenador del francés Christophe Lemaitre, medalla de bronce en los 200 metros del último Mundial y uno de los atletas que intenta contrarrestar la actual superioridad jamaicana, que volverá a ponerse a prueba en los cada vez más cercanos Juegos Olímpicos londinenses.
Antes, sin embargo, Blake y Bolt, como ya sucediera el pasado viernes por la noche en la prueba de los 100 metros de la series clasificatorias para los Juegos, ya se han visto las caras, aunque Mills haya tratado de reducir al máximo sus duelos particulares. Una vieja y protectora costumbre arraigada entre entrenadores y mánagers que tiene como objetivo salvaguardar a sus pupilos de posibles fracasos e intentar mantener en lo más alto sus respectivos cachés. Eso, siempre y cuando el poder del dinero no llame a la puerta de manera insistente y provocadora. Una circunstancia que, sin embargo, no hará falta que asome en Londres, donde tras la victoria de Blake en el último enfrentamiento directo entre ambos, uno y otro lucharán por reinar por encima de las fugaces piernas del otro.
el protagonista
l Edad. 22 años; 180 cm y 78 kg.
l Lugar de nacimiento. Parroquia de Saint James (Jamaica).
l Medallista prematuro. En el Campeonato Nacional Juvenil de Jamaica de 2006 fue oro en 100 y 200 metros lisos, y bronce ese mismo año en el Campeonato Mundial Junior de Atletismo en 100 m, con un tiempo de 10,42 segundos.
l La sombra del dopaje. Blake vivió su momento más complicado cuando, en 2009, fue suspendido durante tres meses al detectársele un estimulante en su cuerpo.
l A punto de hacer historia. Tras su oro en la final del Mundial de 2011 en los 100 metros, en la última jornada de la Liga Diamante del año pasado, logró el segundo mejor tiempo de la historia en los 200, a tan solo 7 centésimas del de Bolt.
Blake se impuso a Bolt el pasado viernes en la prueba clasificatoria de los 100 metros
Ambos se medirán en los Juegos Olímpicos de Londres por el cetro del atletismo mundial
Blake, en el Mundial de Daegu del año pasado. Foto: afp