Vitoria. Fue más el trueno que la tormenta. Más ruido que otra cosa. Luego, nada. La nube negra pasó sin dejar huella. Ni una gota. O, lo que es lo mismo, Euskaltel-Euskadi ha estrenado estos días en el Tour de Suiza un nuevo maillot en el que luce el logotipo de Euskadi impuesto por el Gobierno vasco y el acontecimiento ha pasado desapercibido. ¿Alguien se ha fijado? ¿Se nota? ¿Se distingue? ¿Hay diferencia? ¿Venden mejor ahora los corredores de Euskaltel la imagen de Euskadi como reclamaban desde el Ejecutivo de Gasteiz?
La marca del Gobierno vasco, el logotipo con las letras en blanco y el rabito suelto de la ñ que liga a Euskadi con España, figura ahora en dos lugares del maillot naranja de Euskaltel: en el costado derecho y en el hombro izquierdo, el espacio que antes ocupaban dos logotipos de la Fundación Euskadi. Las pretensiones iniciales del Gobierno vasco, de todas maneras, eran mucho más ambiciosas. Proponían desde el Departamento de Turismo, que es de donde parte la subvención con el propósito de promocionar Euskadi como destino turístico, que su logotipo figurara en otros tres espacios más (el cuello, el pecho y el margen izquierdo del culotte) borrando del maillot cualquier rastro de la Fundación Euskadi, extremo al que se opuso desde el inicio Miguel Madariaga por una cuestión sentimental o de principios, porque pese a que no hay duda de que el Gobierno vasco es uno de los pilares sobre los que creció y se sustenta actualmente el equipo, el logotipo de la Fundación es el símbolo del equipo, el escudo. "Es como si quisieran quitar el escudo del pecho al Real Madrid", llegó a comparar Madariaga hace unos meses en un diario madrileño. El manager del equipo vasco ha logrado mantener el logotipo de la Fundación en tres lugares del maillot y que el culotte quede como estaba, con la ikurriña, el nombre de Euskaltel, el de la Fundación y Orbea.
El debut del maillto pone fin al litigio entre el equipo y el Gobierno vasco, que había amenazado hace meses a Madariaga con no hacer efectiva la subvención de 900.000 euros si no recomponía el vestuario de los ciclistas e incluía el logotipo mencionado para lucirlo en todas las carreras a partir de abril de 2012, algo que no se cumplió porque Madariaga adujo que el Ejecutivo vasco avisó de esa condición para recibir la subvención en el mes de enero, cuando los maillots de la temporada 2012 ya estaban hechos y el coste de rehacerlos era inasumible.
Al Gobierno vasco le ha costado incluir su logotipo en el maillot cerca de 50.000 euros adicionales que, de todos modos, no cubren el total del desembolso. Euskaltel-Euskadi deberá llevar el maillot en cien días de competición antes del final de la temporada que no incluye el Tour.