GIJÓN. Alrededor de 10.000 personas han llenado las grada oeste del estadio, más conocida como la "Tribunona", para dar el último adiós, entre lágrimas, al que fuera técnico del equipo rojiblanco durante casi seis temporadas y para arropar a su familia, entre ellos su mujer e hijo, que han asistido al acto.
En la misa han estado presentes numerosas personalidades del ámbito político y deportivo, entre los que se encontraban el presidente del Sporting, Manuel Vega Arango; la consejera de Educación, Cultura y Deportes, Ana González, y la alcaldesa de Gijón, Carmen Moriyón.
También han asistido representantes del resto de grupos de la Corporación municipal, además del coordinador de IU en Asturias, Jesús Iglesias y el líder del PRC y expresidente de Cantabria, Miguel Ángel Revilla.
El capellán del Sporting de Gijón, Fernando Fueyo, ha sido el sacerdote encargado de oficiar esta emotiva celebración cuyo altar estaba situado en el césped del campo de El Molinón y en la que han intervenido el Coro Manín, de Lastres, el tenor Joaquín Pixán y el cantautor asturiano Pipo Prendes.
Fueyo ha resaltado el recuerdo de Preciado, fallecido el pasado jueves, como el de un hombre que "luchó contra viento y marea" y que siempre derrochó "optimismo a raudales".
El capellán explicó a los presentes que el acto de esta tarde no era ni "un partido, ni un homenaje", era "la oración por un hermano" que se fue "inesperadamente".
"Lo tuvimos tantas veces en el banquillo apretándose la corbata", ha reflexionado Fueyo antes de asegurar: "Ahora lo tenemos en nuestro corazón".
El sacerdote ha recordado algunas de las frases célebres de Manuel Preciado, como la de "mañana saldrá el sol", y ha animado a la familia del técnico cántabro a "mirar hacia adelante y hacia arriba".
El capellán le ha ensalzado como un hombre con un "optimismo a raudales" que tenía como consigna el querer hacer felices a los demás.
"Él está junto a nosotros y nos seguirá ayudando", ha dicho Fernando Fueyo, que para terminar la liturgia ha subrayado: "Ahora sí, Manolo, va por ti".
Tras estas palabras un aplauso de varios minutos se ha escuchado en el estadio de El Molinón.
Posteriormente, las canciones de Joaquín Pixán y Pipo Prendes y un vídeo homenaje en honor a Preciado han cerrado el acto de despedida al técnico cántabro.