Madrid. El italiano Andrea Guardini, del Farnese, ganó en el día de ayer la decimoctava etapa del Giro de Italia disputada entre San Vito de Cadore y Vedelago, de 149 Kilómetros, jornada llana en la que el español Joaquim "Purito" Rodríguez mantuvo la maglia rosa.

Guardini, joven velocista de veintidos años que lleva siete victorias en la temporada, seis de ellas en el Tour de Langkawi, superó por velocidad al gran favorito, el británico Mark Cavendish (Sky), que se vio sorprendido por el ataque final del ciclista del Farnese, y a otro italiano, Roberto Ferrari, del equipo Androni, dando tiempo, de esta manera, al pelotón con un tiempo de 3 horas y 52 segundos.

Se trató de una etapa de transición para los favoritos en un recorrido llano que no ofrecía dificultad alguna y que suponía la última oportunidad para los sprinters. Por ello, los candidatos a la victoria final en clasificación general reservaron fuerzas para las dos siguientes etapas de alta montaña, donde se puede decidir el Giro.

A la cita con los grandes puertos llegará de rosa el ciclista catalán Purito Rodríguez (Katusha), quien pasó un día tranquilo y pudo mantener sin complicaciones las distancias en la general con sus perseguidores más directos, es decir, 30 segundos respecto al canadiense Ryder Hesjedal (Garmin) y 1.22 minutos sobre el italiano Ivan Basso (Liquigas).

No faltó, a lo largo de la etapa, la fuga habitual, que fue tempranera. En el kilómetro tres ya partieron en busca de lo imposible De Negri (Farnese), Pagani (Colnago) y Clement (Rabobank). Se entendieron bien, pero el impulso del Sky de Cavendish agrupó de nuevo al pelotón a cincuenta y seis kilómetros de meta.

Poco después hubo otro intento de aislarse del pelotón, con Clemento de nuevo, Keizer (Vacansoleil), Kaisen (Lotto) y Delage (Francaise), que abrieron carrera una veintena de kilómetros. El sprint parecía cantado, pero de nuevo Delage y Bak (Lotto) intentaron la sorpresa, sin suerte.

El Sky trató de organizar la llegada imponiendo su tren, pero el Saxo Bank de los hermanos argentinos Lucas y Juan José Haedo querían pescar su etapa, por lo que se colocó al frente, tirando a bloque.

Así se llegó al tramo final con todo por decidir. El último kilómetro se abrió a cualquier posibilidad. Cavendish no fue llevado en butaca como en otras ocasiones y en medio del descontrol surgió la figura de Guardini para inaugurar su historial en el Giro de Italia.

La decimonovena etapa se disputará entre Treviso y Alpe di Pampeago, de 198 kilómetros, con cinco puertos de montaña. Penúltima prueba para un Purito que cada día ve más cercana -únicamente quedan tres jornadas- su victoria final en este Giro de Italia 2012.