La crisis dentro del sindicato de jugadores de la NBA vivió ayer un nuevo capítulo al conocerse que la oficina federal del fiscal general de Nueva York ha abierto una investigación sobre sus finanzas. Desde que saliera a la luz pública la denuncia por parte del actual presidente, Derek Fisher, que deseaba que se hiciese una investigación independiente de las finanzas de la organización, el conflicto se ha agudizado hasta límites insospechados con este nuevo paso legal.