Sevilla. José Antonio Reyes vuelve a su casa ocho años después de emigrar al fútbol inglés y contribuyera así al saneamiento económico de su club, tras una oferta "desorbitada" del Arsenal de Arsene Wenger. El equipo inglés pagó entonces cerca de 36 millones de euros. Ante tal oferta, el presidente sevillista, José María Del Nido, calificó de "irresponsabilidad" no aceptarla.

En su etapa en el Sevilla jugó casi un centenar de partidos (concretamente 95) y marcó 24 goles en dos temporadas y media. Debutó con 16 años en la temporada 1999-00. Reyes vuelve con un amplio historial de títulos: una Liga, una Premier, una Europa League, una Supercopa de Europa, una Copa de Inglaterra, una Carling, una Community Shield y una Copa de la Liga de Portugal.

En el Arsenal, fue un fijo hasta que tuvo ilusión. Nada más llegar conquistó la Premier. En la siguiente temporada, 2004-05, jugó 30 partidos, y marcó nueve goles. Además, ganó la Copa, jugando los 120 minutos de la final ante el United, y la Community Shield, venciendo también al United, marcando uno de los goles del triunfo. En su último año volvió a ser titular, ganó la Copa Carling, jugando la final, y tuvo un importante papel en la Liga de Campeones. Ése fue su epílogo con Wenger.

Reyes jugó el Mundial de 2006 y tras éste fichó por el Real Madrid. En la Castellana las lesiones le frenaron. Comenzó como titular pero acabó como revulsivo de Capello. Contribuyó para que el Madrid se proclamara campeón de Liga, al marcar dos goles ante el Mallorca en la última jornada.

De Chamartín Reyes salió al Atlético de Madrid. En la temporada siguiente se fue al Benfica, club en el que coincidió con el técnico Quique Sánchez Flores, con el que recuperó lo mejor de su fútbol. En Lisboa ganó la Copa de la Liga. Al verano siguiente regresó al Atlético, donde se convirtió en fijo cuando Quique tomó el mando. Fue entonces cuando el utrerano, junto a Agüero, Forlán y Simao, compuso una delantera que llevó a los atléticos a ganar la Europa League y la Supercopa de Europa.