SEPANG (MALASIA). En la segunda vuelta de la carrera, Simoncelli afrontaba una curva de derechas cuando perdió el control de su moto. El italiano se aferró al manillar y cruzó el asfalto a lo ancho, quedando en medio de la trayectoria de Colin Edwards (Yamaha). La moto del estadounidense pasó por encima el cuello de Simoncelli, que perdió el casco a consecuencia del escalofriante percance.

En el accidente también se vio involucrado el mejor amigo en la parrilla de Simoncelli, Valentino Rossi (Yamaha), que chocó con Edwards pero logró evitar la caída. Mientras que el estadounidense sufría un fuerte impacto, Simoncelli quedaba inerte sobre el asfalto de Sepang.

Automáticamente, los comisarios de carrera sacaron la bandera roja y comenzó un tenso periodo de espera que se alargó unos 50 minutos hasta que se confirmó el fallecimiento de Simoncelli. El consejero delegado de Dorna, Carmelo Ezpeleta, enseguida confirmó la gravedad de la situación. "Marco está mal y no estamos para correr", dijo con cara de circunstancias.

El piloto del San Carlo Honda Gresini, con parada cardiorrespiratoria, fue trasladado a la clínica móvil e inmediatamente llevado a un hospital cercano en helicóptero, pero la gravedad de sus lesiones impidió que los médicos pudieran salvarle la vida. Poco más de un año después del fallecimiento del japonés Shoya Tomizawa, todo el 'paddock' vuelve a llorar a un piloto.