Copenhague. El ciclista alemán Tony Martin se proclamó campeón del mundo en la modalidad de contrarreloj tras imponerse con autoridad en el recorrido de 46,4 kilómetros, con salida y meta en Copenhague, por delante del británico Bradley Wiggins y el suizo Fabian Cancellara, con el español Jonathan Castroviejo rayando a gran nivel. El germano, bronce mundialista en 2009 y 2010, demostró su condición de gran favorito al triunfo y apenas dio opciones al resto de candidatos desde prácticamente el primer kilómetro, dominando con solvencia y permitindose incluso el lujo de celebrar el maillot arco iris en su llegada a meta, cuando aún faltaba por entrar Cancellara. Así, Alemania firmó un gran doblete tras el oro conseguido 24 horas antes por la veterana Judith Arndt en la crono femenina.
Martin dejó claro que era el más fuerte, algo que se había podido comprobar durante toda la temporada, bañada de triunfos de prestigio en las cronos de la Dauphiné Libéré, del Tour de Francia y de la Vuelta a España, entre otros. Su gran rival, Espartaco, defensor del oro de 2010 y que buscaba su quinto entorchado de la modalidad, no pudo con el alemán, e incluso estuvo cerca de quedarse fuera del podio por un percance en los kilómetros finales. De hecho, el corredor del HTC-Highroad, a una media de casi 52 km/h, fue el único capaz de bajar de la barrera de los 54 minutos, y con un tiempo de 53:43 se impuso con una cómoda ventaja sobre Bradley Wiggins, otro especialista y que se quedó a 1:15, y del helvético, al que aventajó en 1:20. Martin, que incluso dobló a David Millar, plata en Geelong (Austrlia), marcó los mejores tiempos en todos los puntos, y sólo el tetracampeón mundial pudo estar cerca hasta los últimos 20 kilómetros.
Pero el campeón olímpico no pudo mantener su ritmo de la primera mitad del recorrido e incluso en una de las últimas curvas se fue contra la valla, sin percance físico, pero sí en tiempo para quedarse sin el subcamponato. Sin embargo, ese error no le impidió coger un bronce, el segundo de su carrera tras el de 2005 en Madrid, dejando a otro alemán, Bert Grabsch, campeón del mundo en 2008, sin el podio por escasos once segundos.
Por su parte, en cuanto a la representación vasca, la buena noticia vino por parte del joven Jonathan Castroviejo, del Euskaltel-Euskadi, que logró plaza olímpica para Londres 2012 para España después de rayar a un gran nivel. El de Getxo, que se estrenaba en esta modalidad en unos Mundiales, no se vio perjudicado por salir de los primeros, y fue de los que mejor rodaron en el inicio, ya que sólo los grandes aspirantes le fueron relegando en la clasificación para terminar undécimo a 3:34 de Tony Martin. De todos modos, el corredor vasco puede sentirse satisfecho de ver nombres de prestigio en la lucha contra el crono por detrás de él como el sueco Gustav Larsson, subcampeón olímpico y mundial en 2009, el canadiense Sven Tuft, plata en 2008, el esloveno Janez Brajkovic, o el estadounidense Taylor Phinney. En cambio, el otro participante español, Jesús Herrada, del Movistar Team, no tuvo tanta suerte y concluyó en la trigesimonovena posición, yendo de menos a más y acabando a 5:39 del nuevo maillot arco iris.