vitoria. La ilusión por el fútbol y las ganas de competir por mero disfrute retornan este fin de semana a los campos de Álava. Lejos del glamour de la Liga de las estrellas, existe otro fútbol obrero con menos repercusión pública que se da cita cada fin de semana. El Aurrera es el candidato número uno a recuperar la categoría que perdió la temporada pasada. Dentro de la Regional Preferente alavesa que arranca esta tarde no existen dudas, pero desde el club rojillo prefieren rodearse de una aureola de prudencia. "No cabe duda de que la idea es estar arriba, pero seguro que otros equipos también tienen buenos jugadores", aconseja el presidente del Aurrera, Fernando Urzelai. La continuidad del bloque de la pasada temporada le convierte en favorito, aunque el técnico es ahora Roberto Sáez, que el pasado curso dirigió al filial ya desaparecido.
El Amurrio, el otro conjunto descendido de Tercera, también figura en la lista de aspirantes a navegar en los puestos cabeceros. Dirigido por Jon Aspuru, el entrenador que dirigió al equipo en el tramo final del pasado curso, el cuadro blanquiazul ha apostado por una mezcla entre los jugadores que siguen de la temporada pasada y el filial, que ha desaparecido.
El Salvatierra, en el que cumple su segunda campaña como técnico Jonathan Marrero, porfiará por el retorno a Tercera en su segunda tentativa seguida. A pesar de las bajas de Ekaitz Alcántara (Alavés B) y Didaka Esnaola (Hernani), el plantel es similar al de la pasada temporada. El San Martín, de nuevo entrenado por Pablo Díez, también ha configurado una plantilla competitiva al recuperar jugadores que hace dos campañas le catapultaron a la segunda plaza y le permitieron jugar el play off de ascenso. El Zaramaga es otro conjunto llamado a figurar arriba y se plantea la meta de mejorar la cuarta plaza conseguida la temporada pasada. La plantilla, en la que destaca la continuidad del veterano goleador Aitor Leiba, es similar a la del pasado ejercicio. "Para mí el máximo favorito es el Aurrera, le he visto jugar en pretemporada y es un gran conjunto", ensalza Felipe Rodríguez, que cumple su tercera temporada como técnico. El San Ignacio, que la pasada campaña fue quinto, espera ofrecer un buen nivel de la mano de Enrique Arrizabalaga, que lo dirige por tercer año seguido.
El Pilar, que mantiene idéntica plantilla, tiene nuevo técnico en la persona de Daniel Quijano, que hace dos temporadas dirigió al desaparecido Bruno Villarreal.
La pugna por el descenso No menos apasionante será la pugna por esquivar el temido descenso. Cabe destacar las hondas modificaciones sufridas en el Lantarón, que ha cambiado de directiva. El nuevo técnico es Aitor Saenz, que la pasada campaña dirigió al equipo cadete del Alavés y que dirigirá por vez primera en su trayectoria deportiva en Regional Preferente. "Hasta agosto no me incorporé y ha costado conseguir jugadores. Nos costará arrancar, pero espero que no tengamos grandes dificultades para mantenernos", indica Aitor. Igualmente pelearán otros conjuntos por no descender como el Lakua, dirigido por Txumari; el Abetxuko, entrenado por Gorka Ruiz por segunda campaña consecutiva; el Ariznabarra en el que sigue Manu Martínez, y el Laudio B.
De otro lado, el Nanclares buscará la permanencia dirigido por el entrenador más veterano del grupo puesto que Juan Carlos Villalain encara su cuarta temporada consecutiva. No cabe obviar a los cuatro equipos recién ascendidos. El Campezo, campeón de la 1ª Regional de la temporada pasada; el Lakua Arriaga, segundo en 1ª Regional el pasado curso y que será dirigido de nuevo por Pablo Huertas, el entrenador que consiguió el ascenso. El Iru-Bat, que será entrenado por Alfredo Sáez, ha renovado su plantilla para el reto de la Regional Preferente y ha incorporado a 17 jugadores. El Retorno, entrenado por Jesús Sangermán, a priori parece el más débil y tratará de resistirse a los pronósticos oscuros.