Misano. Los malos resultados de Valentino Rossi han acentuado esta temporada la crisis del motociclismo italiano, que va camino de sumar su segunda temporada consecutiva sin ganar un título mundial. El declive de Rossi ha ido paralelo al del motociclismo italiano, que con el del domingo suma 16 grandes premios sin que uno de sus pilotos suba a los más alto del podio en MotoGP. Hay que remontarse más de una década, entre 1998 y 1999, para encontrar una racha parecida, cuando Max Biaggi ganó en la República Checa y en Sudáfrica, entonces con las 500 c.c. Entre esos dos grandes premios hubo 17 sin una victoria italiana en la categoría reina.
En 2011, solo Andrea Iannone ha ganado, dos victorias en Moto2, en España y la República Checa, para ser tercero del campeonato por detrás del alemán Stefan Bradl y el español Marc Márquez, pero sin posibilidades de luchar por el título en la categoría intermedia, en otra época dominada por los pilotos transalpinos. En MotoGP, Andrea Dovizioso es tercero. Una posición propiciada por la caída de Dani Pedrosa, en Le Mans, en un accidente provocado por otro italiano, Marco Simoncelli, hoy la gran esperanza de ese país, amigo y paisano de Rossi, un deportista mediático y llamado a suceder a Valentino.
La crisis italiana también ha coincidido con la mejor época del motociclismo español. Por si fuera poco, en los dos grandes premios disputados en ese país, el de Italia en Mugello y el de San Marino en Misano, tres pilotos españoles, Lorenzo, Márquez y Terol, han copado los tres primeros puestos del podio.