madrid. El parte médico emitido ayer por los servicios médicos de la selección española de baloncesto sobre el estado del alero Rudy Fernández, lesionado en el partido amistoso contra Eslovenia en Granada, descartó que sufra una dolencia grave. El todavía jugador de los Dallas Mavericks, en la órbita del Real Madrid mientras se prolongue el lockout de la NBA, se lesionó en el minuto 18 y no volvió a salir a la pista a jugar en el segundo encuentro seguido de la selección contra el conjunto esloveno, en el que el cuadro de Sergio Scariolo venció por 79-57 y en el que no participó, con un esguince de tobillo, el base Ricky Rubio, quien también recibirá tratamiento en los próximos días.

Tras el partido, Rudy Fernández fue sometido a una resonancia magnética que, según el médico de la selección, Víctor Láinez, desveló que el mallorquín tenía "una contusión que le ha producido un hematoma más edema intramuscular en el codo derecho como consecuencia de un fuerte rodillazo por lo que precisará de tratamiento de fisioterapia y de antiinflamatorios". "Su evolución diaria irá marcando los plazos para su progresiva reincoporación al trabajo con el resto del grupo", apuntó el galeno.

España continúa su preparación para el Europeo de Lituania en Murcia, donde se enfrentará este jueves (21.30 horas) a Australia. Ayer, el equipo acudió a Lorca para mostrar su apoyo a la localidad por los daños que causaron en la ciudad los terremotos del 11 de mayo.

De momento, la selección española ha ganado todos los encuentros amistosos disputados hasta el momento (76-53 a Francia, 90-78 a Lituania, 96-59 a Bulgaria, y 73-61 y 79-57 a Eslovenia), con la excepción del disputado en Kaunas ante el conjunto báltico (88-76). Scariolo debe efectuar en un breve margen de tiempo un descarte para la competición y todo hace indicar que el sacrificado puede ser el madridista Carlos Suárez.