LONDRES. El Liverpool logró su primera victoria en el Emirates Stadium y suma cuatro puntos en los dos primeros partidos de la Premier, mientras que el Arsenal evidenció su mal momento tras la marcha al FC Barcelona de su capitán Cesc Fábregas y se estanca en la tabla con un solo punto.
A pesar de la notable actuación que firmó el reciente campeón de la Copa América en el primer partido de liga, el técnico Kenny Dalglish prescindió de Suarez en el equipo titular y planteó una delantera formada por Carroll y Kuyt, que no estuvo acertada en la primera parte del encuento.
El uruguayo creó la jugada que dio lugar al primer gol del Liveropol y firmó el segundo en el tiempo de descuento, cuando los "reds" ya jugaban con un hombre menos por la expulsión de Frimpong.
Por parte del Arsenal, el joven español Ignasi Miquel, de 18 años, tuvo su primera oportunidad en la Premier League cuando, en el minuto 15 del partido, el defensa Koscielny cayó lesionado y tuvo que abandonar el terreno de juego.
Ante la debilidad de su centro del campo debido a la ausencia de Fábregas, Wegner echó mano en esta ocasión desde el primer minuto del francés Samri Nasri, que en la primera jornada de liga no había sido convocado debido a la inminencia de su salida de Londres.
Pese al cambio de estrategia de los "gunner", los centrocampistas no conseguían conectar con su único delantero, el recién nombrado capitán Van Persie, en parte por la presión que ejercía el Liverpool en la zona de creación de los de Wenger.
Dada la imposibilidad por parte del Arsenal de hilar jugadas en las cercanías del área rival, Arshavin, Nasri y Sagna trataban en la primera parte de desestabilizar al Liverpool a base de jugadas individuales, que raras veces ponían en aprietos al guardameta Pepe Reina.
A mediados de la segunda parte, el Liverpool relajó la presión sobre el medio campo "gunner", lo que permitió al Arsenal disfrutar de sus mejores minutos de juego, aunque no consiguió trasladar al marcador su dominio sobre el césped.
El encuentro dio un giro a los 25 minutos de la segunda parte con la expulsión del centrocampista del Arsenal Frimpong, un punto de inflexión que ambos técnicos aprovecharon para definir varios cambios.
Kenny Dalglish se lanzó a por el encuentro dejando entrar al uruguayo Luis Suárez, que no tardó ni un minuto en provocar la primera ocasión de peligro ante el portero Szczesny, mientras que Wenger cambió su centro del campo dando entrada al joven Lansbury y enviando a Arshavin al banquillo.
En el 77, cinco minutos después de la entrada de Suárez, el uruguayo creó una jugada en la que el balón, tras rebotar en el defensa Ramsey, terminó en la red de los "gunner".
El mismo Suárez remataba a los de Arsene Wenger culminando desde dentro del área una jugada de la que él mismo fue el protagonista.