vitoria. EN un flanco, la Asociación de Futbolistas Españoles (AFE); en el otro, la Liga de Fútbol Profesional (LFP). En juego, un nuevo convenio colectivo. Los dos púgiles están inmersos en el que podría ser el quinto asalto entre las disputas de ambos entes, pues cuatro son los antecedentes de huelgas que llevaron a cabo los futbolistas bajo previos enfrentamientos de intereses. Si bien, no todos los conatos de parón terminaron sin fútbol para el aficionado.

La primera huelga que ejercieron los jugadores sucedió el 4 de marzo de 1979, cuando la AFE apenas contaba con un año de vida. Entonces, los futbolistas exigían la abolición del derecho de retención, además de ser incluidos en la Seguridad Social y la supresión del que era límite de edad, de 23 años, para militar en Tercera División. Aquel movimiento sentó un precedente, pues viendo el exitoso resultado alcanzado por el colectivo de jugadores, el de 13 de septiembre de 1981 hubo dos semanas más de parón.

Si bien, si en el primer caso no se celebraron los partidos, en el segundo, los clubes alinearon a juveniles para saltar al césped. La hemorragia de días sin fútbol se detuvo cuando los jugadores decidieron desconvocar la huelga una vez conseguido el pago de las deudas y la abolición de la hasta aquella fecha normativa de alinear a jugadores sub'20.

Aquellos primeros años de la AFE fueron los más ajetreados en cuanto a convocatorias, pues la siguiente temporada, otra huelga se fijó en el calendario con fecha del 11 de abril de 1982, momento en que restaban tres jornadas para el desenlace del campeonato. De las huelgas efectuadas es la de menor trascendencia, pues un día después fue desconvocada por la poca repercusión de la misma. Aunque la chispa no prendió la pólvora según lo deseado por la AFE, el 16 de abril se alcanzó un acuerdo con la LFP. En aquella ocasión, se dio la posibilidad de impugnar la que era actual Ordenanza Laboral de los Futbolistas. Asimismo, se decidió estudiar la fórmula para crear y financiar un fondo de garantías con unas condiciones que no gravaran demasiado a clubes y futbolistas. No en vano, a la AFE se le encargó redactar un documento en el que figurasen todas las deudas pendientes, pues quedaban por pagar unos 8 millones de pesetas, de los que 5 millones pertenecían a las deudas todavía no abonadas de 1979 y que motivaron la segunda huelga del fútbol estatal.

La última huelga se convocó para el 3 de septiembre de 1984 y se prolongó durante 16 días. A diferencia de las anteriores, esta contó con el apoyo de la mayoría de sus afiliados. Se reclamaba tratar aspectos como la reconversión de aficionados a profesionales en caso de disputar seis jornadas, la desaparición de las licencias de amateur compensado, la anulación de límites de edad para las categorías, el descenso para clubes morosos o la compensación económica a afectados por impagos. Al final, se llegó al consenso que perseguía la estabilidad laboral.

No obstante, también ha habido retrocesos tras la amenaza. La última vez que el sindicato de los futbolistas convocó una huelga fue en 1997. Esta se propuso debido a la llegada masiva de jugadores foráneos. Pero la situación no alcanzó mayor repercusión, dado que se alcanzó un acuerdo entre la AFE, la LFP y la Federación Española (RFEF) que estableció unas limitaciones en la cantidad de extranjeros. Una norma que entró en vigor en la 2000-2001.

Y es que, los últimos ejemplos de tensión vividos entre la AFE y la LFP se han saldado sin detenciones en la competición. El inicio del curso 2008-2009, por ejemplo, estuvo pendiente de un convenio entre patronal y sindicato, al igual que ahora acontece, persiguiendo la firma de un nuevo convenio colectivo. El Consejo Superior de Deportes tomó cartas en el asunto y se rubricó un convenio que dejó desactualizado el de 1998. Los dos últimos casos, mientras, se han resuelto mediante la justicia y sin parones. En 2011 la AFE se negó a que sus representados jugasen el 2 de enero y después, la LFP quiso impedir la emisión obligatoria de partidos en directo. En estos casos no hubo huelga. ¿Y ahora? ¿Acontecerá el quinto asalto?

Los últimos conatos de parón, por jugar un 2 de enero y por la emisión obligatoria de partidos, quedaron en amago