shangai. El equipo de relevos de Estados Unidos, con Michael Phelps y Ryan Lochte, arrebató ayer a Francia el oro en la final de 4x200 metros libre gracias a la ventaja que les dio, entre otras cosas, la técnica subacuática de Lochte, que le permitió adelantar en los últimos metros al francés Fabien Gilot.
La medalla se sumó al otro oro que, cerca de una hora y media antes, había ganado el mismo Lochte en la final de los 200 metros espalda, de manera que ya ayer sumaba cuatro medallas de oro en estos Mundiales de Shanghai, mientras para Phelps es la segunda ocasión en que sube a lo más alto del podio en la ciudad china.
Phelps, el nadador más reconocido de la historia, que acumula 16 oros olímpicos, ocho de ellos en los Juegos de Pekín 2008, nadó ayer en la primera posta y puso a los estadounidenses en tercer lugar, por detrás de la estrella alemana Paul Biedermann y del francés Yannick Agnel.
Su compañero Peter Vanderkaay puso a los americanos en primera posición, aunque en la tercera posta el francés Jeremy Stravius, que el pasado martes ganó el oro, empatado con su compatriota Camille Lacourt, en los 100 metros espalda, ganó la ventaja para su país y dejó al estadounidense Richard Berens a la zaga.
Fue entonces cuando, en cada uno de los cambios de sentido de la última posta, Lochte fue ganando terreno a Fabien Gilot, hasta dejarlo definitivamente atrás en los últimos 50 metros para llegar con 2,14 segundos de ventaja y marcar un tiempo para Estados Unidos de 7:02.67, seguido por el 7:04.81 de Francia y el 7:05.67 de China.
EN UNA FORMA INCREÍBLE La prueba demostró la forma en que se encuentran las dos grandes estrellas de la natación estadounidense. Después de nadar los dos en las series de la mañana, Lochte ganó por la tarde el oro de 200 metros espalda, Phelps se clasificó una hora después para los 100 mariposa, y tres cuartos de oro más tarde participaron en el oro de los relevos para Estados Unidos.
Además, hay que recordar que el jueves Lochte marcó el único récord mundial conseguido en Shanghai hasta ahora, sin ayuda de los bañadores de alto rendimiento prohibidos después de los Mundiales de Roma 2009, y se proclamó campeón mundial de 200 metros estilos, con un tiempo de 1:54.00.
Ayer, poco antes de ganar en los relevos, Lochte logró su tercer oro de Shanghai 2011 al imponerse en la final masculina de 200 metros espalda con un tiempo de 1:52.96, en una prueba en la que la plata se la llevó el japonés Ryosuke Irie (1:54.11), y el bronce fue para el estadounidense Tyler Clary (1:54.69).
Entretanto, en la final femenina de 200 metros braza también conquistó el oro una estadounidense, la nadadora Rebecca Soni (2:21.47), seguida en el podio por la rusa Yuliya Efimova (2:22.22) y la canadiense Martha McCabe (2:24.81).
En la final masculina de la misma categoría ganó, por su parte, el húngaro Gyurta (2:08.41), mientras la plata fue para el japonés Kitajima (2:08.63) y el bronce para el alemán Vom Lehn (2:09.06). La danesa Jeanette Ottesen y la bielorrusa Aliaksandra Herasimenia empataron y compartieron el oro en la final de los 100 metros libre (53,45), mientras la holandesa Kromowidjojo (53,66) se colgó el bronce. Por último, la española Duane da Rocha terminó en la posición número 14 de las semifinales de 200 metros espalda.