alpe d'huez. Samuel Sánchez acabó ayer con una doble sensación. De una parte, maldijo no haber firmado su segunda victoria de etapa en el presente Tour y el no poder acercarse al podio definitivo. Por otra, no podía destilar mayor gozo tras conocer que de forma matemática era suyo el maillot de lunares rojos que le acredita como rey de la montaña. Así, subirá mañana al cajón de París gracias a su galardón como mejor escalador -lo que ya logró en 1974 Txomin Perurena- y selló otro hito en la andadura en la ronda gala de Euskaltel-Euskadi, que se aupó al podio en 2007 gracias al premio a la combatividad logrado por Amets Txurruka.

Vencedor de la etapa de Luz Ardiden y segundo en Plateau de Beille y Alpe D'Huez, Sánchez encabeza esta clasificación con 108 puntos, por delante del luxemburgués Andy Schleck, que hoy defenderá su amarillo, que cuenta con 98, y de Jelle Vanendert, con 74 puntos. A falta de la contrarreloj de hoy en Grenoble y del fin de fiesta que se vivirá en París, el campeón olímpico en los Juegos de Pekín subrayó que "es un orgullo subir al podio de París para ponerme un maillot de mucho prestigio. Para mí y mi equipo es una bonita victoria y lo tomo como una recompensa a todo nuestro trabajo en todo el Tour".

Los propósitos de Samu en esta edición de la carrera francesa quedan colmados con este premio. "No en vano, para mí el balance del Tour es positivo, ya que a la etapa de Luz Ardiden hay que añadir este maillot de la montaña y un puesto entre los diez primeros de la general", dijo el ovetense, que pasa a formar parte de un palmarés donde figuran un ramillete de míticos corredores. Es más, el récord de triunfos generales de la montaña está en poder del galo Richard Virenque, con siete, seguido de Bahamontes, con seis. A priori, el último corredor estatal que se hizo con el premio de la montaña fue Perurena, pero el de 2008 acabó siendo asignado a Carlos Sastre, en perjuicio de Bernhard Kohl, a quien se le retiró tras dar positivo por CERA y confesar su dopaje.

Tirando de ambición, Sánchez sí que lamentó que ayer "al final se fuera al traste la etapa y el podio". "Ha sido una pena porque físicamente me he encontrado muy bien, aunque el jueves tuve un desfallecimiento. De todas formas el Tour para nuestro equipo ha sido bueno", señaló el de Euskaltel, quien reconoció que en los últimos compases en Alpe D'Huez "iba justo de fuerzas", por lo que no pudo evitar la victoria de Pierre Rolland.

"En la subida, Contador ha salido primero. Yo he ido bien a mi ritmo y cuando he visto que el cuerpo me respondía tras la paliza del día anterior me he lanzado a por él con todas las ganas del mundo. He arrastrado a Rolland, pero no he conseguido soltarlo y al final se ha llevado la etapa", narró. Samu hizo también un alegato acerca de la gran etapa que brindó a los aficionados al ciclismo Alberto Contador aun sabiendo el de Pinto que ya no tenía opciones para luchar por la general. "Lo que ha hecho Contador ha sido increíble. Atacó de salida, en el Telégrafo, y ha desarrollado una jornada magnífica. Soy amigo de él y le admiro porque es un campeón. Lleva con una frialdad tremenda todo lo que le está pasando y eso solo lo hace un campeón", relató.