SAINT-FLOUR. "Entonces dijeron que me lo habían dejado, que me había caído llovido del cielo. Esta vez lo he ido a buscar. He corrido cada Tour de Francia desde entonces y sé lo difícil que es vestirse de amarillo. Por eso ahora me sabe mejor", afirmó el francés del Europcar.
Pese a que el liderazgo no era el objetivo que se había marcado, el ciclista de La Vendée, departamento en el que comenzó el Tour, afirmó que lo fue viendo posible a medida que avanzaban los kilómetros y que se lanzó a conseguirlo.
"Teníamos siete minutos de ventaja y atrás había caídas. Hablé con mi director y pensé que era posible. Los últimos 60 kilómetros los he hecho como si estuviera escapado en solitario para buscar el liderato", señaló.
"He sacrificado la victoria de etapa, que era mi primer objetivo, para poder conseguir el liderato. Estoy muy feliz. No creo que pueda conservarlo diez días como en 2004, pero ahora me sabe mejor", reiteró.
Voeckler lamentó las caídas de dos de sus compañeros de fuga, el español Juan Antonio Flecha y del holandés Johnny Hoogerland, embestidos por un coche de la televisión francesa.
"Es una caída que no debió suceder, ya hay demasiado peligro en el ciclismo como para que se añada más", afirmó el francés, que evitó "entrar en polémicas".
El ciclista agregó que no podían esperar a los dos damnificados porque su escapada no hubiera podido progresar.
"Si hubiera sido a cien kilómetros podíamos haber esperado, pero en ese punto no. Yo hubiera preferido que fuéramos cinco, habrían dado más relevos y nuestro margen sería mayor", indicó.