Ferrer, de 29 años, dio la segunda gran sorpresa de la primera jornada de individuales de los cuartos de final de la Copa Davis al darle a España el segundo punto ante Estados Unidos, que llega como el gran favorito para estar en las semifinales.
Después del brillante triunfo que había conseguido en el primer partido Feliciano López, número dos del equipo español, al imponerse por 6-4, 3-6, 6-3, 6-7 (2-7) y 8-6, Ferrer cerró con broche de oro la jornada.
El jugador alicantino, que tiene marca de 35-10 en los partidos de individuales de la Copa Davis, volvió a mostrar el gran momento por el que atraviesa, que le hace merecedor de ser el sexto del mundo.
Su espíritu de lucha fue el que le permitió ganar el primer set en un gran desempate, que se decidió 11-9 a su favor.
La manera como Ferrer ganó la manga iba a ser clave para el desarrollo del resto del partido, en el que Roddick volvió a tener su mejor fuerte en el saque, pero que se encontró con un resto formidable del jugador español para al final tener que rendirse a pesar de estar ante sus seguidoes.
De nuevo Ferrer supo sufrir y remontar un 0-3 en el segundo set para venir de atrás y con un juego magistral desde el fondo de la pista y asegurando su saque logró ganarlo por 7-5 y dejar ya listo a Roddick para el tercero, que sólo aguanto hasta el 3-3.
Ferrer le rompió el saque en el séptimo y el jugador español hizo el recorrido final hasta la victoria con una demostración de clase, control y mejor condición física que su rival, que acabó agotado física y mentalmete.
"Creo que la clave del partido estuvo en el primer set cuando me dieron la opción de seguir en el desempate y al final ganarlo", declaró Ferrer. "Para mi fue el impulsó que necesitaba y Andy (Roddick) quedó muy tocado".
Ferrer, que tiene 5-3 en los duelos contra Roddick, admitió que había jugado uno de sus mejores partidos en cuanto al resto, siendo la única manera que se puede ganar a un gran especialista en el saque.
Lo mismo que había sucedido con López, el gran juego de Ferrer hizo que los miles de seguidores que llegaron al Frank Ewin Center, de la Universidad de Texas, en Austin, se lo supiesen reconocer con la ovación que recibió al final del partido.
Además los jugadores españoles confirmaron lo que habían dicho en las declaraciones previas a la eliminatoria, que trabajaron muy bien en la adaptación a la pista rápida montada por Estados Unidos y para nada pensaron en la ausencia de Rafael Nadal, el número dos del mundo.
A pesar de la gran jornada y de tener la ventaja de 0-2, tanto el capitán del equipo español, Albert Costa, como los jugadores, son conscientes que la eliminatoria sólo estará ganada cuando consigan el tercer punto y eso todavía no se ha logrado.
La primera gran oportunidad para hacerlo la tendrán este sábado, cuando se dispute el partido de dobles en el que Estados Unidos tiene perfectamente definida la pareja con los hermanos gemelos Bob y Mike Bryan, pero no sucede lo mismo con la española.
Costa no quiso adelantar si al final va a decidirse por López junto al madrileño Fernando Verdasco o buscará darle descanso al tenista toledano tras el esfuerzo realizado en el partido individual contra Fish.
"Todavía no tengo nada decidió, pero como es lógico podemos contar con Marcel (Granollers), aunque todavía no he hablado con los jugadores", declaró Costa, al concluir el partido entre Ferrer y Roddick. "En principio el oficial es López que fue el que salió en el sorteo".
Costa considera que igual que España se ha puesto arriba con 0-2 Estados Unidos puede dar la vuelta a la eliminatoria a partir de mañana, sábado, con el partido de dobles, de ahí que la concentración en los jugadores españoles debe estar al máximo, como hasta ahora.
Mientras tanto, en el lado estadounidense la decepción y frustración era la nota dominante con el capitán del equipo Jim Courier al frente en lo que está siendo su debut en territorio nacional.
Courier dijo que en ninguno de los dos partidos los tantos decisivos había caído del lado de sus jugadores, pero había que darle crédito tanto a López como Ferrer que lucharon al máximo.
Por su parte, Roddick y Fish admitieron que "habían fallado a sus seguidores", especialmente el primero que consiguió traer la eliminatoria a Austin, su ciudad adoptiva, para que fuese la primera vez que la competición de la Copa Davis llega a la capital de la ciudad tejana en los 110 años de competición.
Estados Unidos tiene ventaja de 5-4 en los enfrentamientos con España y el ganador de la presente eliminatoria tendrá como rival al ganador de la que disputan Francia contra Alemania.