SILKEBORG. Tenían amistad y ha crecido en el Europeo sub'21 de Dinamarca. Muniain y Thiago hasta tienen un baile preparado para la celebración en Aarhus en caso de que se proclamen campeones. El centrocampista del Barcelona tiene enamorados a todos con su fútbol.
"Desde el primer momento que lo vi supe que iba a ser un grande del fútbol. No hace falta entender mucho para saber que Thiago hace magia con el balón. Es simplemente diferente lo que hace, está al alcance de muy pocos y sin duda de aquí a unos pocos años estaremos hablando del número uno", manifestó.
Muniain es el pequeño del grupo pero el que lleva la voz cantante en las bromas. Después de salir en la prensa local admitiendo que le gustan las chicas rubias y que quería conocer a danesas ha aguantado el cachondeo de sus compañeros. Se venga haciendo hablar a alguno en público en los últimos instantes de cada cena.
"Estas anécdotas son importantes porque es lo que se ve luego reflejado en el campo. En las cenas solemos hacer algún brindis y me pongo a dirigir la orquesta. Suelo decir unas palabras y hago que otros hablen. Nos echamos unas risas", desvela.
Se muestra plenamente convencido en las posibilidades de España de proclamarse campeona de Europa sub'21 aunque advierte del peligro de Suiza, selección que tiene a varios integrantes del grupo de jugadores que conquistó el Mundial sub'17.
"Hemos ido partido a partido siendo fieles a nuestro estilo y al final hemos tenido nuestra recompensa. Llega lo que todos habíamos esperado desde el primer momento, el objetivo que nos habíamos puesto. Ya que estamos aquí, a darlo y ojalá salgamos con la medalla de campeones", afirmó.
"Jugué el Mundial de Nigeria sub'17 en el que Suiza fue campeona y tenían un equipo muy completo, con grandes jugadores. Se parece bastante a la selección que tienen ahora. Si ganaron ese Mundial y llegan a la final del Europeo es porque tienen gente muy competitiva", adviertió.
Pese a que el seleccionador Luis Milla ha utilizado a los mismos jugadores durante todo el torneo, Muniain no piensa que el cansancio pueda pasar factura aunque admite que lo notan en el último capítulo de la temporada.
"Después de una temporada que ha sido tan larga quizás notas un poco ese cansancio, pero las ganas y la ilusión pueden mucho más. A estas alturas, estando donde estamos, el cansancio se queda al margen porque las ganas de jugar esta final tiran mucho más", concluyó.