madrid. Real Madrid y Barcelona afrontan hoy (22.00 horas/Autonómicas y laSexta) el primero de los cuatro 'clásicos' que les esperan en los próximos 18 días, en el que está en juego tanto el título de Liga como el primer punto en la batalla psicológica. El golpe inicial en cualquier contienda puede resultar decisivo y, aunque en este encuentro la aspiración deportiva es menor, dado que el equipo azulgrana tiene casi en el bolsillo el título, el ganador del duelo recibiría un importante impulso de cara a la final de la Copa del Rey del miércoles y las semifinales de la Liga de Campeones.
Si el Barcelona se impone en este partido la Liga estaría sentenciada, ya que la distancia entre ambos sería de 11 puntos (más el extra del 'gol-average' a seis jornadas del final). Mientras, si el ganador es el Real Madrid, los cinco puntos dejarían una puerta abierta a la esperanza y obligarían a los azulgrana a seguir gastando más energía en el torneo doméstico.
la prensa española se planta Los periodistas españoles abandonaron en la tarde de ayer la sala de prensa de la ciudad deportiva de Valdebebas como protesta por la decisión de José Mourinho de no hablar en la víspera del clásico liguero ante el Barcelona. Mourinho decidió por la mañana ceder la palabra a su segundo entrenador, Aitor Karanka, y no atender a los medios de comunicación antes de enfrentarse al Barcelona. Tras avisar los periodistas españoles al departamento de comunicación del Real Madrid de que no presenciarían la comparecencia de Karanka y abandonarían la sala de prensa en el momento en que se iniciase, Mourinho decidió por primera vez cuando habla su segundo, acompañarle en una rueda de prensa que siguieron una veintena de periodistas extranjeros.
