Barcelona. El Barcelona se juega en Donestk (20.45 horas, TVE) su pase por tercer año consecutivo a las semifinales de la Liga de Campeones, con la seguridad del 5-1 de la ida y con el propósito de vivir un partido sin sobresaltos ante el Shakhtar, cuyo técnico, Lucescu, ya da por perdida la eliminatoria.

En el horizonte está el cuádruple enfrentamiento con el Real Madrid, al que se medirá el próximo sábado en Liga, el miércoles siguiente en la final de la Copa del Rey y, si se cumplen los pronósticos, en la penúltima ronda de la Champions.

El entrenador del conjunto azulgrana, Pep Guardiola, no podrá contar para este encuentro con los lesionados, Carles Puyol, Eric Abidal y Bojan Krkic, ni con el sancionado Andrés Iniesta.

En cualquier caso, Guardiola intentará armar un equipo de garantías para no pasar apuros en el Donbass Arena, donde el Shakhtar acostumbra a rendir a un altísimo nivel.

Lucescu tendrá que remodelar la retaguardia con la inclusión de algún defensa inexperto o jugar con una línea de tres zagueros y con cinco jugadores en el centro del campo.