REAL MADRID Prigioni (6), Llull (9), Suárez (12), Reyes (7), Tomic (9) -quinteto inicial- Mirotic (7), Tucker (12) y Fischer (4).
POWER ELECTRONICS VALENCIA Cook (0), Rafa Martínez (16), Savanovic (19), Pietrus (0), Javtokas (3) -quinteto inicial- Navarro (2), Lishchuk (6), De Colo (6) y Richardson (6),
Parciales 11-17, 29-25, 18-9, 8-7.
Árbitros Drabikovsky (UKR), Pukl (SLO) y Sahin (ITA).
Estadio Caja Mágica de Madrid. Lleno. 12.093 espectadores
Madrid. El Real Madrid agotó ayer en un intenso quinto partido (66-58) al Power Electronics Valencia y volverá, 15 años después, a disputar una Final a Cuatro de la máxima competición europea, la Euroliga.
El poder del equipo blanco en la zona y el acierto de un gran Carlos Suárez, 12 puntos, 10 rebotes y 19 de valoración, fueron decisivos para responder a un extraordinario inicio del Power Valencia. Los visitantes, con nueve puntos de Savanovic y dos de Martínez y un gran Cook, dejó a un romo Real Madrid nueve abajo con un contundente 11-2 en los primeros cinco minutos. Pero los blancos reaccionaron gracias a Tucker y Mirotic y lograron llegar al descanso sólo dos puntos por debajo (40-42). La defensa madridista mejoró tras el descanso y los locales llegaron al cuarto decisivo siete arriba, su máxima ventaja, al dejar su rival en un parcial de 18-9 en el tercer periodo.
Siete abajo para el Power (62-55) indicaba el marcador de la Caja Mágica al entrar en los cinco minutos finales. La ansiedad y la precipitación pudieron entonces con los dos equipos, incapaces de ver aro durante más de dos minutos. El rebote ofensivo del Madrid llevó siete puntos definitivos de ventaja a los blancos ya en el último minuto de una apasionante eliminatoria.