Vitoria. La recta final de la temporada regular de la NBA entra en su fase más decisiva con los Heat de Miami y los Lakers de Los Ángeles avisando de que están listos para luchar por el título ante rivales directos como los Spurs de San Antonio y los Magic de Orlando. Mientras, los Celtics comienzan a crear algunas dudas por el rendimiento de algunas individualidades, todo lo contrario de lo que les sucede a los Thunder, que volvieron a contar con el apoyo de sus estrellas para seguir arrollando.
La crisis de juego comienza a desaparecer de los Heat después de dar una exhibición ante los Spurs (110-80), el mejor equipo de la competición. Si el pasado 4 de marzo Miami llegó al AT&T Center de San Antonio en plena crisis de juego y cayó de paliza (125-95), la madrugada de ayer el equipo de Florida se tomó la revancha. Chris Bosh, con un doble-doble de 30 puntos y 12 rebotes, fue el líder de su equipo, que también tuvo el apoyo de Dwyane Wade, que sumó 29 tantos.
La derrota supuso el peor correctivo para los Spurs de Tiago Splitte desde el 7 de abril de 2005, cuando perdieron por 104-68 ante los Mavericks. Los Lakers, actuales campeones, se impusieron a unos dubitativos Magic (97-84). Pau Gasol, imparable junto a Bynum, fue el máximo anotador del duelo, con 23 puntos.
