El tercer enfrentamiento entre baleares y almerienses casi consecutivo, dos de ellos en la Copa del Rey, no defraudó, y también finalizó con un festival goles, un total de 19. La derrota hunde al Almería en la tabla, mientras que el Mallorca se acerca a las posiciones europeas.
El equipo balear saltó al terreno de juego con la lección aprendida, por lo visto desde el inicio de las acciones, y no se dejó sorprender por el mismo rival que le había eliminado de la Copa del Rey marcándole un 3-4 en el mismo escenario, dos de esos goles anotados en los primeros 3 minutos del partido.
Con el 'once' habitual, el Mallorca se mostró mucho más compacto, incluso, superando un primer susto en el minuto 1 a cargo del argentino Pablo Daniel Piati, que estuvo muy cerca de marcar y de repetir el mismo guión del pasado jueves.
Pero, esa fue la única ocasión clara de gol que tuvo el Almería en los primeros 45 minutos, suyo técnico, José Luis Oltra, también realizó un par de cambios con respecto al partido de la Copa, dando entrada al meta brasileño Daniel Alves y al nigeriano Kalu Uche.
Los dos goles que marcó el Mallorca (minutos 12 y 36) fueron muy protestados por los jugadores del Almería.
En el primero, obra del central Iván Ramis, de cabeza, hubo una falta previa a Emilio Nsue muy discutible, y en el segundo, anotó Víctor Casadesús con su compañero Michael Pereira tendido en el suelo, quejándose de un golpe. Los futbolistas del conjunto almeriense creyeron que el Mallorca iba a detener el juego, pero no fue así.
Oltra reforzó el ataque en la segunda parte, dando entrada al delantero argentino José Leonardo Ulloa y dejando en el vestuario al danés Michael Jakobsen, que además tenía una tarjeta amarilla. Ulloa y Uche formaron el tándem ofensivo de un Almería que debía remontar un 2-0 en 45 minutos.
El equipo andaluz tuvo más tiempo el balón en su poder, pero sin crear ocasiones claras de gol, ante un Mallorca que dedicó sus principales esfuerzos a defender el 2-0 e impedir que su rival se metiera en el partido marcando un gol.
El Almería abrigó esperanzas de remontar el partido con el gol de Albert Crusat (min. 65), pero la alegría le duró 30 segundos, lo que tardó el camerunés Pierre Webó en dar el 'pase de la muerte' a Emilio Nsue, que marcó a placer, ante el monumental enfado de José Luis Oltra.
A partir de ese instante, el partido se rompió ya que el Almería se lanzó a un ataque desesperado, dejando grandes espacios para la ofensiva balear.
Con todo sentenciado, el Mallorca gestionó con tranquilidad su ventaja hasta sumar tres puntos que le vuelven a situar cerca de la zona europea de la tabla.