Bilbao. La Asociación de Futbolistas Españoles (AFE) ha lanzado un nuevo órdago a la Liga de Fútbol Profesional (LFP) iniciando un procedimiento urgente ante la Sala de lo Social de la Audiencia Nacional en la que solicitará "suspender cautelarmente" los partidos previstos para el próximo domingo 2 de enero y disputar la jornada íntegramente el lunes 3 de enero. En consecuencia, el Athletic, que tenía previsto jugar frente al Deportivo a las 16.00 horas del domingo día 2 de enero, desconoce a día de hoy cuando disputará este partido, correspondiente a la décimo séptima jornada liguera.

Los futbolistas justifican esta medida de presión "ante el incumplimiento por parte de la LFP del convenio colectivo firmado el 31 de julio de 2008". De acuerdo con el punto número 2 del artículo regulador, no se pueden programar partidos oficiales del 23 de diciembre al 2 de enero, ambas fechas inclusive, porque están contempladas en dicho calendario vacacional.

En el fondo bulle un segundo frente abierto, mucho más importante para el sindicato de futbolistas, que la AFE tiene abierto con la LFP: el impago de las deudas contraídos con algunos jugadores, especialmente con los del Betis.

La Liga de Fútbol Profesional había fijado cinco partidos de la jornada 17 de Primera División para el próximo 2 de enero, fecha en la que también debían disputarse 10 de los 11 encuentros de la jornada 18 de Segunda División.

En una nota informativa, la AFE insiste en el incumplimiento por parte de la LFP del Convenio Colectivo firmado el 31 de julio de 2008.

La comparecencia tendrá lugar mañana a las 10.00 horas en la Audiencia Nacional, informa el sindicato de jugadores. Posteriormente a este procedimiento, la AFE deberá interponer la demanda principal de resolución de conflicto colectivo, que transcurrirá por los trámites ordinarios.

Con todo, la AFE asegura que sigue "abierta solucionar las diferencias existentes a través del diálogo".

La AFE y la LFP se reunieron el pasado miércoles por cuarta vez para estudiar las denuncias por impagos en Primera y Segunda división y el cumplimiento del convenio colectivo, que incluye el 2 de enero como vacaciones. El presidente de la AFE, Luis Manuel Rubiales, dijo ese mismo día que el domingo 2 de enero no habría partidos de Liga si no se cambiaban los horarios, pues ellos sólo aceptaban jugar entre las 17.00 y las 19.00 horas. Esta condición de la AFE supondría unas pérdidas de seis a ocho millones de euros a las televisiones, que son quienes imponen los horarios de los partidos.

En cuanto a las deudas, desde la LFP se insiste en que ellos no disponen de recursos ilimitados, cumplen con el Convenio Colectivo que tiene un límite en el pago a los futbolistas de 3 millones de euros, mientras resolver el conflicto del Betis supondría el pago de 7 millones de euros.