BILBaO. El entrenador del Athletic, Joaquín Caparrós, valoró el asunto del resultado positivo en un control de alcoholemía de su jugador Xabi Castillo cuando viajaba en compañía del jugador de la Real Gorka Elustondo y por el que ha sido sancionado "en grado máximo" por el club rojiblanco. "Ahí ya vamos perdiendo 1-0 porque en el coche iban un rojiblanco y un blanquiazul, y el que sale perdiendo es el rojiblanco. En esta vida hay que ser competitivo y saber hacer las cosas", manifestó el técnico, quien anunció asimismo que el jugador no va a recibir una sanción deportiva. "Hay un régimen interno que el club ha hecho valer y ahí está la predisposición del jugador de reconocer los hechos. No hay que darle más vueltas. Todos tenemos un error y ahora Castillo va a querer hacerlo lo mejor posible", zanjó.

Por otra parte, el entrenador rojiblanco aseguró que en su equipo no hay "psicosis" por la mala racha de resultados fuera de casa, donde ha perdido sus cuatro últimos partidos, y avanzó su intención de invertir esa inercia hoy en el partido de Anoeta.

"No hay psicosis. Somos conscientes de que tenemos que conseguir un buen resultado y lo vamos a intentar en Anoeta porque es el partido más inmediato y además le daría una doble alegría a nuestra afición", señaló el técnico, quien cree que la rivalidad va a hacer que "el espectáculo esté garantizado".

Caparrós incidió en la opinión expresada esta semana por sus jugadores de que deben saltar al campo "como mínimo, con la misma motivación" que un rival que "querrá ganar porque es el Athletic, porque llevan muchos años sin jugar este tipo de partidos y además vuelven después de unos años duros en Segunda".

El utrerano, que vivirá su primer derbi, espera también que el partido sea una "fiesta futbolística", con "mucha rivalidad" sobre el césped y un "pique sano" en las gradas, porque de esta manera "ganaría el fútbol".