roma. El piloto español Fernando Alonso confiesa que tiene ganas de volver a correr "sin ningún ansia" sobre las pistas del Mundial de Fórmula 1 después de las dos semanas de vacaciones que ha disfrutado tras el Gran Premio de Hungría, tiempo que ha aprovechado para desconectar entre Suiza y España.
"Ahora tengo muchas ganas de volver a la pista, pero de modo positivo, sin ningún ansia, es más, con mucha tranquilidad. Estoy contento de que se vuelva a competir sobre dos pistas tan particulares como las del Gran Premio de Bélgica y de Italia", explica Alonso en una entrada divulgada ayer en su blog de la web de la escudería italiana Ferrari.
"El trazado belga es quizá el más fascinante de todo el calendario, mientras que la cita de Monza (Italia) será para mí algo especial, teniendo en cuenta que será mi debut deportivo como corredor de Ferrari ante el público italiano, además de que será sobre un circuito tan importante para la historia del automovilismo", agrega.
El piloto español, bicampeón del Mundo de Fórmula 1, asegura que tiene "buenas sensaciones" de cara a las nuevas citas del campeonato tras las "buenas carreras" disputadas en Alemania y Hungría. "Como dicen los ingleses: keep the momentum (mantente en esa línea), éste debe ser nuestro objetivo, es decir, proseguir por el camino iniciado antes de las vacaciones. Los resultados de Hockenheim (Alemania) y de Budapest no han sido importantes sólo para las dos clasificaciones, sino también por la confianza que nos han dado", apunta Alonso.
El piloto de Ferrari, compañero del brasileño Felipe Massa en la escudería italiana, define como "muy relajantes" las vacaciones que ha disfrutado en estos últimos días, en los que no ha dejado de hacer deporte.
"He intentado quedarme entre Suiza y España, sin hacer largos viajes: nos espera un final de temporada más bien estresante y no me apetecía ver demasiados hoteles ni aeropuertos", comenta Alonso, quien explica que ha conseguido "recargar las pilas" tras un mes de julio "particularmente intenso".
"El realidad, el medio de transporte que más he usado ha sido la bicicleta. Más allá del entrenamiento habitual, me he divertido haciendo una mini Vuelta en las zonas próximas a Oviedo: cinco etapas junto a mis amigos más cercanos que han sido muy divertidas", agrega.
Optimista para el futuro Por ello, el piloto asturiano está convencido de que está listo para afrontar el exigente final del año en el que luchará por su tercer cetro mundialista. "Tres semanas es tiempo más que suficiente para relajarse. He recargado las pilas para prepararme para la parte final de la temporada, que será la misma para todos, lo necesitábamos después de un mes de julio frenético", concluye enviando un mensaje esperanzador a sus miles de seguidores de todo el mundo.