johannesburgo. El goleador eslovaco Robert Vittek se mostró sorprendido por el 3-2 con el que su equipo eliminó a Italia, el actual campeón del mundo, y selló su pase a octavos de final del Mundial de fútbol de Sudáfrica. "Teníamos vuelo para el sábado", reconoció Vittek respecto a las esperanzas con las que su equipo llegaba al partido. Eslovaquia era último del Grupo F y debía derrotar al campeón para pasar.
"Ahora tenemos que cambiarlo", agregó el autor de dos de los goles del partido respecto al aplazado regreso del equipo eslovaco a casa. "Fue un partido muy difícil", agregó, porque "el campeón siempre te puede hacer un gol". "Todavía podemos dar una sorpresa", anunció también el delantero eslovaco de cara a los octavos en su estreno en un Mundial.
lippi, autoinculpado En el otro lado de la balanza, Marcello Lippi se sometió a un ejercicio de autoflagelación pública al asumir "toda la responsabilidad" tras la eliminación de Italia. "Este equipo, en un partido tan importante, durante una hora y 15 minutos, y por razones exclusivamente psicológicas, no pudo jugar", describió con voz serena pero visible tristeza. "Si pasa esto, ¿quién es el responsable? El que entrena. Yo", dijo Lippi tras la derrota.
"Hablando con los jugadores, les dije que estábamos jugándonos el Mundial, que o estábamos dentro o estábamos fuera. Me equivoqué, no creé la dinámica psicológica necesaria. Los jugadores no jugaron, no crearon. ¡No hicieron nada!".
Lippi descartó que la ausencia por lesión de Buffon y la ausencia hasta ayer de Pirlo en la primera fase del Mundial fueran decisivas. "Incluso sin Buffon y sin Pirlo debimos haber jugado diferente".