VITORIA. Ghana quiere mantener su romance con la fortuna. El equipo africano, el primero y único de los seis participantes que ha conseguido una victoria en su Mundial, espera que Australia no suponga un escollo muy grande en su caminar a los octavos de final. El combinado que dirige Milovan Rajevac se impuso en el partido que abrió el Grupo D a Serbia, después de que Asamoah Gyan transformara un absurdo penalti cometido por el defensor Kuzmanovic.

Ese triunfo elevó la moral de la tropa de Ghana que hoy debe aprovechar la inercia vencedora para superar a una Australia, a la que se supone como cenicienta del grupo, como lo demostró la goleada que encajó ante Alemania y que disparó la cotización de los germanos en las apuestas. Rajevac no tiene previsto realizar muchos cambios en el equipo con la única duda de si en su centro del campo jugará Stephen Appiah o lo hará Anthony Annan, ya que el resto de los integrantes del equipo serán, con toda probabilidad, los que se impusieron ante Serbia.

En el bando rival, Australia pierde para este encuentro a uno de sus jugadores importantes, Tim Cahill, que fue expulsado en el encuentro ante los teutones. Brett Holman, que saltó al terreno de juego como sustituto de Grella en la segunda parte de ese encuentro, se perfila como su sustituto. El grupo podría quedar definitivamente resuelto si Alemania gana a Serbia y Ghana vence a Australia.