MILáN. Como ya ocurriera en la eliminatoria ante el CSKA de Moscú, Mourinho podría volver a esconder la carta de Wesley Sneijder hasta última hora. El portugués retiró a su jugador más creativo en el descanso del encuentro ante el Atalanta, aunque hay dudas de si lo hizo por precaución o como baza psicológica. Tras una primera exploración, el internacional holandés pasó a engrosar la lista de las incógnitas para la vuelta de las semifinales de la Liga de Campeones en el Camp Nou. Y así lo hizo saber el jefe de comunicación neroazzurro a la propia prensa catalana.
Por la mañana Sneijder se presentó en la Ciudad deportiva interista en Appiano Gentile pero no se ejercitó con el resto de sus compañeros. Por la tarde, tras más exámenes médicas, se confirmó que sufre "un estiramiento en el recto femoral de la pierna izquierda". Así lo informó oficialmente el Inter en su página web oficial. El que sí se espera que esté es Goran Pandev, casi recuperado de la sobrecarga muscular que arrastra.
Balotelli, después de la que lió en el partido de ida con su afición y con sus propios compañeros, podría entrar en la convocatoria. Y eso que el pasado sábado se permitió el lujo de negarse a ver al equipo que aún defiende, prefiriendo presenciar el compromiso de la Serie B entre el Brescia y el Reggina. Un desafío más que acabará con él en otro club, quizás el Nápoles.