indudablemente CSKA, Barça u Olympiakos son ahora mismo ejemplo de una mayor riqueza técnica y táctica en su juego. El potencial que estos equipos atesoran, sin entrega ni ambición, de poco sirve. Todos sabemos que la mejor manera de ganar una guerra es peleando en todas y cada una de las batallas que se te ponen por delante. Eso es lo que diferencia a los equipos campeones de los buenos equipos. Y ésa es la mentalidad que Dusko y el club han querido inculcar siempre a sus equipos, y que este año, debido a todos los problemas que han acuciado a la plantilla, se han quedado un paso por detrás. Los porcentajes de tiro tanto de tres como de dos puntos dan muestras del acierto de uno y de otro. Si las posesiones se contabilizan sumando T2 + T3 + T1/2 + B.P-R.O (tiros de dos + tiros de tres + más tiros libres partido por dos + balones robados - balones perdidos), en el partido entre el Caja Laboral y el CSKA vemos que el equipo moscovita dispuso de 12 posesiones menos que los vitorianos, pero las aprovechó mucho mejor. Tanto en tiros de dos, como triples y tiros libres, sus porcentajes de acierto fueron superiores al Baskonia. Tuvieron una mejor selección de tiro y a ello acompañó el gran acierto de Holden en la segunda parte, donde fueron incapaces tanto Huertas como Singletary de hacerle sombra. Igual habría que haber intentado emparejarle con un jugador un poco más alto, para impedirle sacar su tiro tan cómodo, a pesar de tener a su defensor delante. Su gran salto acompañado de un tiro que saca muy arriba impidió que los bases baskonistas pudieran entorpecer su mecánica. Ningún equipo de los que perdió el jueves pudo pasar de los 70 puntos, excepto el Madrid, que se fue a los 78, cuando sus medias de anotación son bastante superiores. Eso vuelve a poner en evidencia que sin una buena defensa no se puede llegar a disputar finales. Este partido requería dejar a un lado las defensas tácticas como modus operandi y desplegar una gran defensa física, donde debía primar el estado de los jugadores y su capacidad para retrasar la recepción del balón, aguantar el bote en penetración y responsabilizarse cada uno de su par. Durante toda la serie se ha podido ver que el estado físico de algunos jugadores debido a las lesiones no era el ideal para hacer frente a partidos con tanta exigencia. Y menos con tantos partidos en tan pequeño espacio de tiempo. No nos queda más que felicitar al CSKA por su clasificación para la Final Four y también al gran trabajo realizado por el Baskonia. No hago más que escuchar y escribir palabras de halago por la hazaña que ha conseguido el Partizan. Un equipo que todos los años pierde jugadores importantes (Tripkovic, Velickovic...) pero que apuesta por jóvenes jugadores de la región a los que inculcan responsabilidades, entrega máxima y dedicación. Y consigue año tras año grandes resultados tanto en la Liga Adriática como en Europa. Seguro que Josean estará enfadado por no haber accedido a la Final Four. Y por la pobre imagen que dio el equipo en Moscú. Y por cómo se perdió el jueves después de dar la vuelta al marcador. Pero pienso que si mérito tiene lo del Partizan, también es meritorio lo que ha conseguido este año el Caja Laboral con una plantilla nueva, con un presupuesto por debajo de los grandes y con un gran cúmulo de lesiones que han trastocado los planes de Dusko. Reitero mi enhorabuena y aboco a poner el máximo esfuerzo en el último objetivo de la campaña, la ACB.