A pocos meses de que acabe su segundo mandato y abandone la presidencia del FC Barcelona, Joan Laporta tiene claro que su siguiente vocación será la de ser político. Siempre favorable a los postulados independentistas, el todavía máximo dirigente culé se ha demostrado a sí mismo que está capacitado para gobernar Cataluña.
Laporta afirma en una entrevista que publica el diario Avui en portada, que si entra en política "es para ser presidente de la Generalitat y para gobernar, no para decidir quién gobierna". El presidente del Barça considera estar "capacitado para gobernar" porque, aunque no pueda extrapolarse del todo a la vida política, su paso por el club se lo ha demostrado.
Para Laporta el tripartito es una decepción, igual "que lo fue Zapatero, igual que lo fue Convergència cuando podía incidir de manera contundente en el gobierno español". "Si yo fuera presidente lucharía para que Cataluña tuviera un Estado para tomar decisiones", afirma Laporta.
"El Barça es la mejor herramienta para defender nuestro país porque no está sometido a las estructuras centrales", según Laporta. No ha aclarado si se presentaría sólo o con Reagrupament, la asociación que acaba de abandonar Joan Carretero y doce personas más por discrepancias con un sector de la dirección sobre cómo deben ser aprobadas las listas electorales.
A juicio de Laporta, si toma la decisión de presentarse, también valorará cómo y si sería "en un partido existente o en un movimiento también existente". "Pero yo quiero acción política, y eso quiere decir un partido político porque el objetivo es que Cataluña tenga un Estado propio", señaló sin tapujos.
"Hay que tener incidencia en el Parlament para que, como somos una nación, Cataluña tenga capacidad para administrar los recursos propios y ese es el debate que tenemos que poner sobre la mesa". Lo cierto es que Laporta sigue terco en sus ideas pese a las críticas que recibe desde muchos estamentos.