BILBAO. El primero de esos objetivos, el de la clasificación para la siguiente ronda, lo logrará el equipo de Txus Vidorreta simplemente con ganar al equipo turco, al que ya se impuso hace una semana en Ankara con suficiencia por un contundente 70-85.
Para conseguir la segunda de sus aspiraciones, la de asegurarse el primer puesto, el Bizkaia necesita que el Spirou de Charleroi gane en Bélgica al Spartak de San Petesburgo ruso, un resultado nada descartable teniendo en cuenta el potencial de ambos equipos.
El conjunto bilbaino, en todo caso, quiere recuperar mañana la buenas senda de la que se desvió un tanto el sábado con la derrota en casa frente al Unicaja, ante el que se presentó con un balance de seis victorias en ocho partidos, tres en una Eurocopa en la que está arrasando.
El Bizkaia es el segundo mejor equipo de toda la competición después de tres jornadas. Solo le supera el Panellinios griego por una mejor diferencia de puntos (+56 el equipo ateniense por +51 el vizcaino), si bien el equipo heleno con dos triunfos en casa y el bilbaíno con dos victorias a domicilio.
De cara al encuentro de mañana, el Bizkaia sufre la baja del alero estadounidense Chris Warren, que se volvió a dañar el sábado el tobillo derecho que ya se había lesionado en el primer partido de la temporada.
A pesar de ello, espera repetir el choque de hace una semana en Turquía, en opinión de Vidorreta el "mejor partido fuera de casa" de la temporada de su equipo, además, contra un rival que considera "muy complicado y con mucha calidad individual".
El técnico bilbaino resalta de la plantilla que dirige Murat Ozyer "cinco jugadores americanos de calidad", el base Demond Mallet (ex-Joventut), los aleros Lawayne Wilson y André Owens, y los pívot Erwin Dudley y Kris Lang, y "jugadores turcos con experiencia", como los escoltas Serkan Erdogan (ex-Tau) y Bekir Yarangüme, y el pívot Huseyin Besok.
Al Turk Telekom, una derrota le complicaría mucho la clasificación, sobre todo si el Spartak gana en Charleroi.