- Este viernes 6 de mayo llega a los cines Doctor Strange en el multiverso de la locura, el regreso de Sam Raimi al cine de superhéroes. Un largometraje que combina elementos de fantasía, ciencia ficción, aventura y terror y que es “una oportunidad para soñar en el cine” frente a la situación “aterradora” que vive el mundo. “Una de las virtudes de las películas de Marvel, además de ser geniales, es que permiten evadirte, incluso en los peores momentos”, defiende el cineasta.

Protagonizada por Benedict Cumberbatch, la película narra las consecuencias de lo sucedido tras Spider-Man: No Way Home y las series Bruja Escarlata y Visión y Loki, pues el concepto de multiverso se desbloquea y amplía sus límites de una manera inesperada. Un viaje a lo desconocido que busca ofrecer más de dos horas divertimento para el público en estos tiempos bastante oscuros.

“Es increíblemente caótico y aterrador lo que estamos viviendo como sociedad. Por eso, adoro las películas de Marvel. Son geniales y ofrecen un momento de evasión, de tener un instante para olvidar nuestros problemas. Es la magia tanto de Marvel como del cine, ir a una sala a oscuras y soñar, ver a esos superhéroes que son los que aspiramos a ser, pues hacen lo correcto y hacen que nos inspiremos en ser más grandes de lo que somos”, destaca Raimi.

Doctor Strange en el multiverso de la locura supone la vuelta del cineasta al género de superhéroes. Precisamente fue él uno de los artífices de su popularidad en la gran pantalla, pues fue él quien realizó la primera trilogía cinematográfica de Spider-Man, protagonizada por Tobey Maguire y estrenada entre 2002 y 2007. “Siempre fui un admirador de los cómics del Doctor Strange”, explica Raimi.

“Me fascina el hecho de que sea un mago que usa sus poderes para proteger a la Tierra y nuestro universo de las amenazas mágicas, era lo que me encantaba de niño. Como me gustaba la magia, sentía ese sentimiento de superhéroe”, comparte.