- El público y su comportamiento “ejemplar” es el “ganador” del 56 Festival de Jazz de San Sebastián, que se clausuró el pasado domingo y que ha conseguido, en la segunda edición con restricciones a causa de la pandemia, un porcentaje de venta de entradas del 90% en los escenarios de pago. El director de este evento, Miguel Martín, destacó el “entusiasmo” y la “responsabilidad” que los espectadores mostraron en los cinco días de festival, en los que no se registraron incidencias reseñables.

Entre ellas, Martín mencionó únicamente la lluvía que acompañó el día 22 la noche cubana en la Trinidad de los pianistas, Gonzalo Rubalcaba y Chucho Valdés, así como la sustitución a última hora de un músico de una formación procedente Burdeos que había dado positivo en covid.

Desde el punto de vista artístico, el responsable del Jazzaldia hizo un repaso por escenarios y ha calificado de “magníficos” los conciertos de la plaza de la Trinidad, de los que ha destacado a la cantante estadounidense Cécile McLorin Salvant, a la flautista Naïsam Jalal, así como al gran Brad Mehldau y al guitarrista Bill Frissel, encargados de la clausura.

“Tocar después de un pianista como Brad Mehldau es difícil, pero Frisell entusiasmó y su actuación llegó a la cumbre”, aseguró Martín, quien destacó a Silvia Pérez Cruz entre las citas del auditorio del Kursaal, aunque la “sorpresa” de este espacio la brindó el italiano Giovanni Guidi, que al igual que Franco D’Andrea ofrecieron recitales extraordinarios al piano.

El 57 Festival de Jazz de San Sebastián ya tiene fechas, del 21 al 25 de julio como este año, con la diferencia de que no acabará en domingo, sino en lunes, que será festivo en Euskadi, según recordó el director del Jazzaldia. En ese sentido, además, el regidor del festival resaltó que ésta ha sido “una edición brillante” a pesar de “las circunstancias especiales” y el comportamiento del público, “modélico”.