El Centro de Exposiciones Fundación Vital ofrece a partir de hoy la muestra Harrera/Acogida, que ahonda en el fenómeno de las personas refugiadas como consecuencia de las guerras y los conflictos bélicos. Las piezas han sido realizadas por personas con discapacidad psíquica o intelectual dentro del proyecto Bilbao FormArte. La propuesta permanecerá abierta hasta el próximo 4 de marzo.

Harrera/Acogida es una muestra muy especial tanto por la temática que trata, el fenómeno de los refugiados que se ven obligados a dejar sus lugares de origen como consecuencia de las guerras, los conflictos bélicos y las hambrunas, como por los autores de las piezas que se exhiben, según explican desde Fundación Vital. Han sido creadas por veintidós personas con discapacidad psíquica o intelectual. Bilbao FormArte es un proyecto dirigido a que estas personas desplieguen toda su potencia creadora. Se trata de un centro formativo que ofrece un programa de desarrollo personal y profesional a través de la creación artística. En este proyecto se combinan facetas relacionadas con la educación, a través de la formación personal y la profesional; el empleo, a través de nuevos yacimientos de actividad que pongan en valor el talento y las capacidades específicas de las personas con discapacidad; y las artes y la cultura como medio de desarrollo personal, de creación de imaginarios propios y de participación e interacción social.

Esta exposición, en concreto, es el resultado de diez meses de trabajo. Durante ese tiempo, los participantes en el proyecto se documentaron. Su primera fuente de información fue Gogora, el Instituto de la Memoria, la Convivencia y los Derechos Humanos. A través de los vídeos con los testimonios de los niños de la Guerra Civil refugiados en Francia, Bélgica, Inglaterra y Rusia, así como de los actuales que huyen de las guerras y la hambruna, tuvieron conciencia de estas situaciones y comenzaron a reflexionar sobre la no acogida que actualmente estamos dando a los refugiados.

Con posterioridad, visitaron el Museo de la Paz de Gernika, donde analizaron la necesidad de que exista la paz para la buena convivencia y evitar los conflictos bélicos donde siempre sufre la población civil como ocurrió durante el bombardeo de la localidad vizcaína. Y también fueron recibidos en la Casa sin llaves de Artea, donde los residentes compartieron con ellos sus vivencias, reflexionaron sobre lo bien recibidos que fueron en su casa y sobre si ellos tendrían también la capacidad de recibirles igual de bien. A partir de estas reflexiones desarrollaron cada proyecto de una forma personal, donde cada artista ha ahondado en el tema que más le ha interesado, informándose y ejecutando su obra.

El resultado son las veintiún piezas que se exponen en el Centro de Exposiciones Fundación Vital. Se pueden ver trabajos ejecutados en diferentes soportes y con diferentes técnicas: pintura, técnica mixta, trabajos de marquetería, instalaciones, maquetas proyección audiovisual. Los trabajos recogen desde la belleza y el amor hasta la crueldad y el odio que se puede encontrar en el género humano.