- Fueron los sonidos de Esne Beltza los que marcaron la despedida de 2020 en la sala Kubik. Se puso así el broche a un año extraño como ninguno, en el que el escenario privado de mayor aforo de la capital alavesa sufrió, como todo el resto, los rigores derivados de la pandemia. Aquella actuación del 29 de diciembre se produjo en el marco del circuito Best bat!, paraguas bajo el que también se va a llevar a cabo hoy el primer directo de este 2021 en las tablas de la calle General Álava. Esta vez, el protagonismo será para Huntza.

Como viene siendo habitual en los últimos tiempos por la obligatoriedad de concluir todos los actos culturales antes de las nueve de la noche, está previsto que el concierto arranque a las 18.30 horas (30 minutos antes se abrirán las puertas para facilitar el acceso escalonado). En condiciones normales, no sería de extrañar el lleno. En la actual situación, con los aforos reducidos, ni que decir tiene que, a pesar de todo, el cartel de completo está más que asegurado.

Para la formación, el de hoy también va a ser el primer concierto de un 2021 en el que, es de esperar, la situación pueda cambiar de manera radical para la sociedad en general y para la cultura en particular. Mientras eso llega, Huntza desplegará sus sonidos, energía y éxitos, más allá de las mascarillas, del hecho de que el público tenga que estar sentado o del frío exterior de estos días.