- Se alzó como directora revelación del 2019 con Carmen y Lola cumplidos los 50, pero ahora Arantxa Echevarría vive un momento profesional dulce: acaba de terminar de rodar un filme para Atresmedia, ha dirigido un capítulo de la serie ElCid y le han ofrecido hacer otra "de narcos".

Su opera prima, con la que obtuvo el Goya a la mejor dirección novel, era una película autoral y autoproducida, una historia de amor entre dos mujeres jóvenes gitanas. Hace una semana concluyó el rodaje de La familia perfecta, una comedia de encargo de Atresmedia, protagonizada por Belén Rueda y José Coronado.

La historia gira en torno a Lucía, una mujer en la cincuentena que cree llevar una vida modélica y tenerlo todo bajo control. Pero su ideal de "familia perfecta" empieza a derrumbarse cuando aparece en su vida Sara, la novia de su hijo, una chica joven, libre y deslenguada y una familia política muy diferente a la suya.

"Parece que las mujeres a los 50 desaparecemos de la faz de la Tierra, ya no tienes permiso para escalar el Everest, enamorarte, lo que sea. De eso va la película, una mujer de 50, de clase alta, que se ha construido un mundo perfecto alrededor, pero al verse en una situación completamente diferente descubre la verdadera mujer que hay detrás de toda la parafernalia", comentó la artista.

En un principio el rodaje iba a arrancar en mayo, pero se aplazó por la pandemia, y finalmente se desarrolló entre el 29 de agosto y el 16 de octubre, en plena segunda oleada del virus.

"Hemos cruzado no sé cuantos rubicones, con escenas de boda, 150 figurantes... pero afortunadamente no hemos tenido ningún positivo", dice. Eso sí, el protocolo sanitario y de seguridad hace todo mucho más complicado, los test, las mascarillas que dificultan la comunicación, la distancia seguridad o las medidas especiales con niños y mayores.

Todas estas ofertas han hecho que la artista aplace, por el momento, lo que iba a ser su segundo largometraje con guion propio, Chinas, sobre la segunda generación de emigrantes en el País Vasco.