stá previsto que a lo largo de este otoño vea la luz Izurdeen lekua, el nuevo disco de Mikel Urdangarin. Es el último álbum que ha tomado forma entre las paredes de Silverstar Studios desde que los gasteiztarras Nukore inaugurase las instalaciones ubicadas en Zabalgana con One Minute Silence. "Recuerdo que tenía mucho respeto a aquella grabación ya que era la primera. Cuando estás ideando un proyecto durante tanto tiempo y ves los frutos, es una gran satisfacción, sobre todo porque aquello superó las expectativas que tenía", apunta Iker Bengoa. El guitarrista de los vitorianos Childrain, así como compositor y productor, dice, eso sí, que no tenía otro remedio que afrontar este proyecto: "tenía que hacerlo, aún sabiendo que era una condena".

Ahora que el espacio sopla su primera vela y echa una mirada hacia el pasado más reciente, lo cierto es que en estos doce meses ha habido pocos huecos libres en la agenda. Bandas y artistas de pop, pop-rock, hardcore, metal, canción de autor, punk-rock y clásica, e incluso de percusión africana, han desfilado por delante de Bengoa. En su conjunto o por separado, se ofrecen servicios de grabación, edición, mezcla y mastering, a lo que hay que unir el trabajo que se hace para agencias de publicidad, vídeos institucionales y corportativos... para lo que incluso se cuenta con un casting de actores y actrices. "Todas las dimensiones son importantes", máxime en unos tiempos en los que la aparición del coronavirus ha supuesto poner unas cuantas piedras más en el camino.

Con todo, lo cierto es que "este primer año ha rebasado las expectativas que tenía. Ahora llega lo más difícil. Las metas a corto plazo son seguir en esta línea, que todo el mundo en Vitoria conozca lo que tiene en casa, que lo tenga en el radar, y que eso se traduzca en que la gente de aquí deje de irse fuera para grabar. El largo plazo pasa por invertir el proceso, es decir, que los grupos de fuera vengan aquí", apunta Bengoa, que remarca que el denominador común de cualquier trabajo que salga de sus manos tiene que ser la calidad final. "Eso es lo más importante".

De hecho, ahí está el motor del proyecto, en la propia experiencia como músico del gasteiztarra. "Hace ya un tiempo, en un estudio de grabación me llegaron a decir: anda, si quieres eso vete a Estados Unidos a grabar". A eso se unió una realidad innegable y es que son muchos los grupos y artistas de Vitoria que a la hora de registrar sus nuevos trabajos se van fuera de la ciudad. "Eso es indicio de que hay una ausencia de algo. ¿Cómo es posible que en la capital del País Vasco haya una especie de vacío que lleve a tantas bandas a marcharse?". Así que con el paso de los años, empezó a plantearse que era capaz de afrontar una apuesta que maduró incluso a pesar de la crisis económica y de que Childrain iba creciendo dentro de su trayectoria con Europa como nuevo escenario para su música y sus directos.

Aún así, explica que lo más complicado al principio fue encontrar gente en la capital alavesa que entendiese el proyecto y le ayudara a hacerlo posible. "¿Cuántos estudios de grabación se han abierto en Vitoria en los últimos diez años? Claro, yo iba, por ejemplo, al Ayuntamiento para los trámites de permisos y licencias, pero allí no sabían dónde ubicarme, en qué epígrafe o categoría. Era una especie de rara avis". Algo parecido le sucedió para conseguir encontrar a los operarios que tenían que acondicionar el lugar elegido después de infinidad de viajes en bicicleta por la ciudad. "Me volví loquísimo para encontrar ciertas cosas que había visto en otros sitios, que conocía, que quería€ Hay cosas que no se encuentran nada fácil. De hecho, el proceso previo es algo que no se lo recomiendo a nadie", dice el responsable del estudio.

Toda vez que el estudio -que está presente en las redes sociales y que cuenta con la web www.thesilverstarstudios.com- se puso en marcha, Bengoa tuvo claro que la seriedad en fondos y formas tenía que ser clave. "No puedes estar tres meses grabando un disco. Si eso pasa, significa que algo falla o no es serio. Aquí tengo una agenda que se cumple. Los plazos son muy importantes. Y no tiene que haber nada de autoexplotación, ni de jornadas de diez horas seguidas. A partir de un punto, más es menos. Un cantante que está más de tres horas seguidas cantando, ya se ha pasado, por ejemplo. Y como productor, cuando estás demasiado tiempo seguido, empiezas a dar por buenas cosas que no lo son".

En esa dimensión que también desarrolla aquí, Bengoa entiende que su faz de músico ayuda y mucho. "Me da una capacidad de comprensión y de empatía que quienes vienen, agradecen. Me sitúo siempre en el lado del músico y como sé lo que quizá haga falta para llegar donde él desea, siempre puedo ayudarle mejor", más allá de que nunca se puede perder de vista que "la tecnología hace muchas cosas pero no lo puede todo, por suerte. Éste también es un espacio de aprendizaje en el que tratamos de sacar lo máximo partiendo de lo que cada banda o artista es".

Se va, así, haciendo la labor en un sector como el de la música que está en plena transformación, por lo menos a la hora de difundir lo que cada uno crea. "Todo el mundo ha entendido que es mejor hacer ocho o nueve temas buenos, que lanzar un disco con 14 canciones en las que siete son de relleno. La necesidad también agudiza el ingenio. Es mejor hacer menos y de calidad. Lo que sí se está transformando, más allá de que hagas un LP o un EP, es la distribución posterior. Donde antes estaba el CD y solos los grandes grupos podían hacer lanzamientos audiovisuales, hoy lo último es ley. Tiene que haber una imagen que acompañe al audio, sí o sí", más allá de que Bengoa considera que hay debates profundos sobre estas cuestiones que el sector todavía tiene pendiente tratar.

Al margen de esta cuestión, él tiene claro que le gustaría ver a Childrain grabar aquí un próximo disco, más allá de que sus compañeros ya se han estrenado en el estudio. Y no oculta que a veces, cuando está solo, aprovecha para tocar, componer y cantar: "aquí nadie te oye y te sientes libre", sonríe.

"No puedes estar tres meses grabando un disco. Si eso pasa, significa que algo falla o no es serio"

"La tecnología hace muchas cosas pero no lo puede todo, por suerte"

Silverstar Studios