- Más de un centenar de premios nacionales han firmado una carta abierta dirigida a los responsables políticos de las administraciones públicas con competencias en materia cultural que “transformen sus palabras en hechos” y actúen para paliar las consecuencias de la crisis en el sector generada por la pandemia de coronavirus.

Entre los firmantes de esta carta se encuentran representantes del sector del cine, el teatro o la música, con nombres como los de Pedro Almodóvar, Santiago Auserón, Miguel del Arco, Almudena Grandes, José Luis Gómez, Alberto Iglesias, Antonio Muñoz-Molina, Vicky Peña, Marisa Paredes o Christina Rosenvinge. En la misiva, adelantada por el diario El País, los firmantes aseguran ser “perfectamente conscientes” del estado de emergencia sanitaria y social en España y que “ni mucho menos” pedirán que “se antepongan” sus peticiones para el sector “en un momento en que tantos se juegan la vida valientemente por la salud de los demás”. “Lo primero es lo primero”, añaden. No obstante, sí que piden tanto al Gobierno como a comunidades autónomas y ayuntamientos que “asuman sus responsabilidades, actúen coordinadamente y no se queden esperando al día después”. “Si eluden hoy esta tarea, cuando decidan despertar, para muchas familias y proyectos culturales será demasiado tarde”, subrayaron.

En concreto, consideran que el sector cultural español -representante del 3,2% de PIB- necesita “un tratamiento específico y una consideración en pie de igualdad” con otros sectores productivos. “Si bien es cierto que Cultura, tras semanas de preocupante inacción, ya ha dado las primeras señales, las comunidades autónomas y los ayuntamientos permanecen “prácticamente inactivos”. “Estamos a años luz de nuestros vecinos europeos”, critican, para luego poner como ejemplos a Portugal, que ya ha liberado un fondo para los trabajadores de la cultura; Italia, que destinará más de 130 millones de euros a las artes escénicas y al audiovisual; o Francia, que destinará 20 millones de euros a ayudas para intermitentes del libro, las artes escénicas y la música. “La cultura no es un lujo, pero tampoco es gratis”, destacan en la carta.