Vitoria - Por desgracia, no son una excepción. La historia cultural del ser humano también se construye, incluso hoy, sobre la invisibilización de un incalculable número de mujeres cuya producción creativa no solo no es reconocida, sino que es enterrada en el más absoluto de los olvidos. Por fortuna, siempre hay alguien que se empeña en dar luz a lo que se ha querido mantener a oscuras. No es la primera vez que ese mismo ímpetu se puede ver en la programación que lleva a cabo cada curso el ciclo Cita con la Poesía, coordinado por la escritora Ángela Serna. De hecho, este viernes se volverá a responder al objetivo, en esta ocasión poniendo el foco en las autoras de la generación Beat. Será a partir de las 19.30 horas en la Casa de Cultura Ignacio Aldecoa.

Para dar forma y fondo al recital teatralizado que se compartirá con el público -el acceso es gratuito hasta completar el aforo-, el ciclo va a contar con el trabajo y la complicidad de Mary Zurbano y Txaro Martínez. En Una mosca en la sopa: ¿qué fue de las Beat?, ambas darán vida a creadoras como Elise Cowen, Anne Waldman, Carolyn Cassady, Diane di Prima, Ruth Weiss y Joanne Kyger, mujeres que estarán presentes a través de las dos intérpretes, aunque también se hará referencia a otras figuras relevantes para la generación como Joan Vollmer, "intelectual fundamental para el movimiento" que murió de un disparo durante un juego que se fue de las manos a causa del alcohol.

"No se trata de leer solo poemas. De hecho, leemos muy pocos. Lo que hacemos es que ellas mismas, en persona, hablen", explica Zurbano. Para ello, para contextualizar sus personalidades y trayectorias, "hemos usado una fórmula de entrevista para que cada una tenga su momento y su espacio". De esta forma, quieren acercar al público a unas mujeres "valientes" que "lucharon como los poetas de la generación Beat contra esa estructura de la sociedad norteamericana del momento, la que establecía la familia ideal, la mujer ideal, los niños ideales? Ellas lucharon contra una sociedad tan convencional y establecida", pero también contra la discriminación que, fuera y dentro del movimiento, sufrieron por el mero hecho de ser mujeres.

"Muchos familiares se avergonzaban de sus textos, sobre todo cuando se atrevieron a escribir sobre el sexo de manera natural", recuerda Martínez, que apunta cómo "las relegaron incluso a psiquiátricos porque decían que estaban piradas". El desprecio llegó, eso sí, también por parte de sus compañeros de generación, de aquellos que en este recital no se van a nombrar. "Ellos, que eran unos revolucionarios reivindicativos, se colgaban las medallas. Eran intelectuales que llevaron la poesía a las calles y los bares, pero que también hicieron que ellas fueran invisibles" en recitales y publicaciones, por ejemplo. "Querían ser rebeldes exactamente igual que ellos pero no estaba bien visto que pudieran hacer eso. Tenían que cumplir con su cometido de sociedad conservadora y puritana", añade Zurbano.

De todo ello y más se hablará en un recital teatralizado que ambas reconocen que les ha llevado "mucho trabajo y muchas horas", un proceso en el que "hemos descubierto muchas cosas". "Ha sido muy interesante descubrirlas, leerlas, sentirlas, habitarlas", dice Martínez. Y también saber "no juzgarlas", comenta Zurbano. Así lo están viviendo en un nuevo proceso creativo entre las dos. "Cuanto más nos conocemos más fácil nos resulta el código del trabajo" más allá de que se confiesan un "amor mutuo" de dos "creativas viscerales".