La danza y unas imágenes de gran belleza son las herramientas que utiliza esta compañía para hablar sobre el trabajo infantil pero, también, sobre el mundo de fantasía gracias al cual niños y niñas resisten la dureza de la vida cotidiana. Las protagonistas de esta historia viven en un lugar rodeado de tierra y pobreza. Trabajan y trabajan en el campo sin descanso, pero para sobrevivir, han convertido su trabajo en juego, y es que? es imposible prohibirle a un niño que juegue.
Hoy 2 de enero, a las 17.00 y a las 18.30 horas. En el Teatro Félix Petite (Centro cívico Ibaiondo. Landaberde, 31).