No deja de ser paradójica y hasta punto contradictoria la coyuntura por la que atraviesa Mediaset y su constelación de canales con excepcionales resultados en audiencia y por el contrario, la decisión de importantes clientes que han retirado spots de la antena Telecinco y Cuatro, que además están agotando sus productos estrella, con el anuncio de la retirada de GH, que descansará larga temporada con decisión estratégica sin explicaciones ni paños calientes para oxigenar una situación empresarial harto complicada, a la que se añade el final de GHVIP y Got Talent en crisis de empresa de calado desconocido, pero inquietante.

La contradicción entre buenos resultados de televidentes y las decisiones ejecutivas, deberá resolverse a la mayor rapidez posible, porque no hay que olvidar que Atresmedia y Mediaset son empresas que cotizan en bolsa, instituciones muy sensibles a los bandazos y saltos en el vacío que soportan con escasa facilidad.

Jorge Javier Vázquez, Jordi González y Carlos Sobera están teniendo la responsabilidad de conducir el producto estrella de la tele realidad, con la concursante Adara camino del triunfo final, seguida de Mila Ximénez, auténtica candidata de la empresa para hacerse con el maletín de la pasta. Tres conductores-presentadores que han puesto toda la carne en el asador para mantener vivas las largas travesías dedicadas en la programación de la cadena a la casa de Guadalix de la Sierra.

Tres modos de presentar, deambular por el plató y preguntar con mayor o menor acierto. Un Jorge Javier, en plan reinona del reality, un Jordi González encadenado a sus torpezas expresivas y un debutante Carlos Sobera al que le sobra el traje por las mangas en cada aparición televisiva. Tres personajes en busca de autor en las noches de Telecinco y su agitado momento actual. Una cadena que intenta aparentar tranquilidad cuando las aguas bajan turbulentas. Cosas de la tele.